me gustas tanto que las palabras existentes tienen miedo ya que ninguna es capaz de explicar tan siquiera un poco mi sentimiento por tí. lo de las almas gemelas, destinadas, hilos rojos, predestinados; todo eso nos queda corto porque somos todavía más. / habla con suma suavidad mientras coloca sus brazos al rededor del cuello de su amado, acercándolo aún más y ladea su cabecita hacia la derecha; formando de sus labios un pequeñito pico besa en reiteradas ocasiones los del adverso, sintiéndose feliz por estar a su lado pese a la simplicidad de sus actos tal vez.