meIanchoIic

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          	 ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ traga el recuerdo atascado en los 
          	 ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ confines de la memoria como si
          	 ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ fuese medicina amarga, intenta 
          	 ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ pensar que el peso de una mano
          	 ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ en su cabeza podría equivaler a 
          	 ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ la de una corona y he ahí su errata.
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meIanchoIic

‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ tw: contenido sexual.
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lemonpielovers

otra epístola. la tinta de esta se manifiesta con escritura pulcra sobre la delicada lámina de arroz, y el mensaje expresa firme el propósito: un llamado de socorro para desvelar la realidad de un caso fresco. la sentencia de muerte injusta e infame de cándida dama perteneciente a un burdel, del cual solo sospechosos débiles se logró capturar y ningún culpable. 
          
          una parada interesante entre la larga odisea de amelia. en mayoría, la experiencia que ella portaba yace dentro situaciones de hurto, desapariciones, raptos, ataques, plagas, entre otros; los actos ilícitos del homicidio eran infrecuentes sobre el camino de la detective, por ello, su curiosidad comienza abrasar a la castaña cual incontrolable llama, mientras cada vez más toma cercanía hacia la escena del suceso. 
          
          al momento, no ofrece ni se suspende a sí misma de visitar la comisaría -aunque las miradas iracundas proyecta ya en psique propia de aquellos que probablemente esperaban su llegada, pero aquello será problema del futuro. debía enfocarse inmediatamente a la razón de tan vasto viaje por ferrocarril. 

meIanchoIic

Rápidamente, una jovencita de aspecto desaliñado se dirigió a la mujer de hebras blanquecinas; atrofiada después de una noche que claramente le había azotado con kilos de trabajo.
            
            Acercó la palma a la oreja de Isabel con un gesto casi cómico, como si estuviese pronunciando un secreto mortífero del más alto calibre. La superiora sin embargo, no se inmutó en lo absoluto; simplemente mantuvo su silencio con aquella curvatura en sus labios, meditando su siguiente movimiento pacientemente.
            
            —Ah… De verdad me apena, pero creo que deberé irme, señorita Amelia —hizo un pequeño ademán a la jovencita a su lado, cargando un comando mudo que se cumplió al instante—. No se preocupe, estaré dejando a una de mis más queridas damiselas con usted. 
            
            Su sonreír se ensanchó al escuchar tacones galopando contra el suelo, dirigiendo la mirada hacia la mujercita que se abría paso con un caminar lento; iluminada tenuemente bajo el resplandor áureo de aquel establecimiento clandestino.
            
            —Diana, conoce a la señorita Amelia. Estarás encargada de hacerle compañía esta noche. 
            
            Isabel hizo un pequeño gesto con la cabeza hacia la muchacha, insinuando un acercamiento entre ambas. Sin palabra alguna, Diana se sentó junto a su respectiva clienta, cortando el especio personal en un abrazo íntimo.
            
            —Gracias, señora Isabel —murmuró con suavidad, escondiendo el rostro en el cuello ajeno—. Me aseguraré de mantenerla satisfecha.
            
            Las despedidas de aquella mujer fueron rápidas, dejando un par de llaves en la mesa frente a ambas y desapareciendo de la escena junto a su asistente; presumiblemente a tratar a otros clientes “especiales”.
            
            —Entonces… 
            
            Jaló de la ropa ajena para revelar más piel, observando la marca de su beso que dejó cuando se refugió en el hombro ajeno. Las palabras se le escapaban con una mezcla de lujuria y monotonía, los ojos empañados por una tristeza imborrable anclados a las facciones de su compañera nocturna.
            
            —¿Empezamos?
            
            @lemonpielovers
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meIanchoIic

Hay susurros. Teorías y escepticismo escrito entre miradas que se encuentran efímeramente, preguntas sin respuestas que se amontonan como una bola de nieve destinada a caer en el abismo del misterio; pero estas son evaporadas rápidamente, pues el calor de manos y labios presionando besos contra la piel en busca de más ganancias empiezan a empañar la claridad de la mente.
            
            Es así que pasan unos minutos, con jovencitas de toda clase recostadas sobre Amelia como polillas adictas al fulgor de la linterna, ronroneando alabanzas lascivas para así encontrar aquello que logre despertar la primera chispa de lujuria y encender las llamas de la pasión de una noche.
            
            —Chicas, por favor… —una voz indudablemente mayor y experta en manifestar gracia y seducción detiene el tiempo para aquellas trabajadoras; una tal “Isabel”, a juzgar por los jadeos sorprendidos de algunas más descuidadas—. Dejen a nuestra clienta respirar. No queremos espantarla, ¿Cierto?
            
            No hubo una respuesta explícita de parte de las mujercitas —quienes lentamente se enderezaron frente a la superiora—, pero su afirmación obediente era tácita. 
            
            —Bien, ¿Por qué no van a darles la bienvenida a otros clientes? Yo las llamaré si nuestra benefactora requiere de su compañía. 
            
            Hay una nube de murmullos colgando sobre la pequeña multitud por algunos segundos, mezclando las disculpas apenas susurradas con refunfuños apaciguados; eventualmente permitiéndole respirar a la mujer nuevamente.
            
            —Disculpe la molestia, algunas veces mis empleadas se emocionan de más —la mayor dedicó una sonrisa delicada, extendiendo un poco más aquella expresión de calmada alegría que siempre lucía en su rostro—. Mi nombre es Isabel, es un placer tenerla aquí esta noche.
            
            @lemonpielovers
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lemonpielovers

─── para haber sido afectada por un asesinato, el lugar prosigue normal . . extrañamente muy tranquilo ───resplandor áureo acaricia su piel con el avanzar de las pisadas femeninas, quienes se detienen una vez encontrándose con la entrada, posterior, el espacio grande del salón rebosante de conversaciones que la noche consumiría.
            
            era necesario ejercer el papel de uno de los tantos clientes, un camuflaje natural para conseguir detalles, fuesen mínimos, relevantes o alguno omitido. 
            
            ─── un ginebra en las rocas, que el hielo no sea tan grande ───da comienzo con simple movimiento y, seguido, toma un lugar en el establecimiento para hacerse destacar sutilmente; acto cual solidifica más con la llegada de su bebercio y haber pagado desmesuradamente, sin mostrar interés en los costos o perder alguna numisma. 
            con esto, estaba segura que captaría la curiosidad de una empleada o un superior, además, de que recibiría un trato más 'especial' a comparación de otros.
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lemonpielovers

FINALMENTE SOY LIBRE
          DE UN SEMESTRE MAS 
          DE LA UNI!!!

lemonpielovers

ahora sí le mando rol de una 
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lemonpielovers

en serio una tremenda y enorme 
            disculpa, ahora sí me tomo por
            sorpresa muchos eventos/exámenes/proyectos/etc etc ToT
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lemonpielovers

ONCE CUENTAS?!!!!

lemonpielovers

OMG si me encanta muchísimo la idea
            tmb pensaba algo similar, tons todo bien ⠀( ദ്ദി ˙ᗜ˙ )⠀
            en un momentito le envío rol sip 
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lemonpielovers

ay dios mío naoooo q horror
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meIanchoIic

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           ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ traga el recuerdo atascado en los 
           ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ confines de la memoria como si
           ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ fuese medicina amarga, intenta 
           ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ pensar que el peso de una mano
           ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ en su cabeza podría equivaler a 
           ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ la de una corona y he ahí su errata.
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