Si era sincero. Para este punto se sentía bastante inútil, le dolía todo, casi no podía caminar y estaba vomitando casi que cada hora. Fue justo por eso que no había podido dormir bien la noche anterior, se la paso en el baño vomitando, siendo su novia quien tenía que llevarlo y gracias a eso tampoco ella había podido dormir bien... Era un desastre total y se sentía mal por no poder hacer cosas por su cuenta. Nisiquiera podía atender a sus hijos porque las piernas le temblaban y no podía cargarlos... Su amada no debía encargarse de cinco niños ella sola, no, era un trabajo de dos y él debía ayudarla... Pero no podía y no se lo permitía por su debilidad reciente.
Ahora mismo se encontraba tomando aire fresco afuera de su casa. Con la pijama puesta aún y su cabello desordenado, debía estar así para estar cómodo. No quería, no quería estar sentado afuera de ese modo y dejar a la mayor sola con los niños. Ella no merecía eso, pero eran recomendaciones del doctor y su novia solo quería que estuviera bien y se curará. Junto a él tenía un balde por si le daban ganas de devolver y en una mesita tenia sus medicamentos y algo de agua... Sinceramente no deseaba tomarlos, temía tener una nueva adicción y por ello mismo no los había tomado o al menos como debería y era por eso de que seguía enfermo... Quizás hasta había empeorado un poco.
Cabeceaba de vez en cuando, se estaba quedando dormido. Era entendible, como se dijo no descanso bien la noche anterior, merecía descansar un poco ahora. En algún punto se había quedado dormido, pero algo hizo que medio abriera los ojos y viera... Lo que fuera esa cosa. Normalmente Frehley solía tener el sueño pesado, pero esta vez no, estaba débil y algo le estaba haciendo estar alerta. No lograba divisar que era exactamente, aún tenía sueño... Pero de cierto modo tenía miedo y se notaba un poco. Esperaba y no le fuera a hacer daño...