𝘄 ◍ l v ⅇ r ⅈ 𝗻 𝕖

─────　ser curioso... puede ser pecado, mein liebe (mi amor).   /ríese suavemente, los labios empalagosos chocan con el dígito adverso y, de ahí, bajan acaramelados a la muñeca. déjale un efímero beso con apenas el roce de estos en la muñeca masculina.    uno que puede costarte muchas cosas; como tus ideas, tus modales, tu raciocinio... ¿qué tanto estás dispuesto a perder?   /bisbisea en un tono de belladona, tan bello como peligroso, deseoso de una afirmativa. los dígitos aterrizan en la pantorrilla del portador de adamantiun, ascendiendo, acarícianle el muslo con dulzura antes de que éstos se adentraran al interior del mismo por encima de la ropa, allí antes de que llegasen a la hendidura del descanso del cuerpo se detuvieron.    los castigos no son únicamente de lo que decimos o hacemos, los pensamientos también se ven incluidos, je.  y, me temo que para mí no hay redención, ¿crees que para tí si la haya, log..?  /juguetón pregunta, realizando circunferencias ligeras en el muslo adverso y, de vez en cuándo desviándose a las zonas no permitidas en busca de provocarle. 

─────　¿e..exagerar? ¡nein! (¡no!), e-ese humo podría matar a alguien incluso. /balbucea. el menor posee un rostro mohín “entristecido” pues, sinceramente, había creído que ese intento de demostrarle que también podía realizar esas «cosas cool» ha fracasado. entre los falanges que acarician sus hebras azuladas, sintiendo el consuelo del tacto, cerrando sus ojos para un mayor disfruté; aprovechóse que se encontraba de rodillas al suelo, las persianas perezosas del mirar vuelven a recogerse para admirar la magnífica estatua masculina que, de manera consiente o no, le ha causado un cosquilleo tentativo, tanto que su manzana de adán se movió cantarina de la saliva que tragó, es allí dónde se engloban la mayoría de los pecados de la humanidad como también los suyos.  ya me dí cuenta que está clase de “adicciones” no son para mí. prefiero otro.. tipo. /comentó, el azulado sonriendo cuál felino embelesado pero, dentro de la pueril actitud que muestra yace un brillo concupiscente que lo hace suspirar, siendo consiente de lo que sus latidos alocados desean.  de esos que te hacen actuar olvidando los pecados.  

─────　¿y qué tiene de malo ser una roca gris y dura? mírame a mí, yo soy demasiado azul... /varoncito de pómulos hasta orejas afectados por las buganvillas azuladas, calor tibio calando su figura, al sentir la caricia efímera, fugaz, sobre su aterciopelada mejilla se inclino anhelando que no cesase; y pupilas ambarinas atenuadas en un destello profundo, empedernido con una única figura; la adversa.  gern geschehen, liebe.. { de nada, cariño },  ¡aunque! a esa corona le falta algo...  ¿y sí le hiciera un collar a la par? ¡se vería tan lindos! así no estaría la corona sola.  /sesgo la cabeza, dejase ir al cuello y sus ocelos, meditasen, com se vería dicho accesorio allí. su cola danzando con suavidad ante esta ocasión.  ¿me dejarías?  /moduló al tantear el actuar hiperactivo característico suyo, erguida la cabeza ahora: sin ser consciente de la cercania ejercida, él dentro de su ilusión no lo notó. tomábase la mano ajena, al parecer, con una mirada totalmente implorante del porqué debía cederle tal petición. 

─────　.. /dió una calada más al cigarrillo que reposaba en sus labios antes de sacarlo entre sus dos lánguidos dedos, liberando el humo hacia el lado contrario de dónde el hombre se plasmaba; sintiendo un burbujeo abrasador en su garganta, efusivamente comenzó a toser debido a su nula tolerancia hacia tal sustancia, sus lagrimales se escurrieron y su respiración se aceleró.  ¡co.. cof!  mal-maldicicón.. ¿¡cómo mierda puedes fumar esa cosa tan..!?  tan.. tan..  ¡ugh!  /reclamó, apenas y recuperando el aire obstruido, de rodillas al suelo; creyendo que así podrá recuperarse más rápido.   ¡verdammt! {¡carajo!} 

─────　¿eeeeh..? /ambas cejas se alzaron en dirección al veterano mutante, parpadeó en binas, ligeramente oneroso. una sonrisita que ocultaba una pronta expresión incordia surcó por sus labios, tomó la corona culminada expuesta entre sus dígitos, examinándola y analizándola para asesorarse que no había un error en un rincón.  por la misma razón que tú al acabar con esa pobrecilla.  /poca focalización tuvo al trato bruto del capullo adulto, estirando entre movimientos lentos su cuerpo hacía dónde el caballero estaba y, a su paso, antes que cayese consigue atrapar entre sus dígitos libres uno de los pétalos despojados; consigue inferir en su espacio personal, sobrepasándolo tras acomodar la corona que le ha colocado y, sonríe enternecido.   nada más, nada menos porque.. ¡a pesar de sus diferencias al estar juntos brillan como uno solo! son.. lindos, se sobrepasan al sol. tal y como la gracia divina de dios.  /musitó, los pómulos adquieren un tinte morado aniñando su expresión neyaphem transformándolo a una ligera, real, de chiquillo pueril. 

─────　mh..  /indistintos éllos acabaron por andar juntos, fuese el campo de tornasoles el porqué y el retraimiento afectándolo; autónomo, desvinculado del control maternal, la mano de ademanes espontáneos tejía el ramillete entre sus dactilares, y es que en su capricho, ansíabale obtener un reacción de sorpresa; y al aún no culminar su corona, su frustración véase esparcida.  ¡por amor a dios! hacer esto no tiene que ser tan difícil.. son iguales a tí; de complicadas. /afirmó, en una berrinchuda queja mirando al símil de las flores frente suya, al varón que arrastró aquí con su característico «¡BAMF!» y en contra de su voluntad. 

─────　a las edades elevadas la vista tiende a desgastarse más..♪. /su afirmación enmarca el sentido incisivo, canturreo petulante hacia el mayor, delatándose entre rayas a su ingenuidad a la par de pericias alternadas qué buscan juntas intentaban encontrarle forma a sus palabras.   ¿cordero..? vaya, ¿lo dices por mí pelo? oh.. ¡oh! ¡¿en américa hay corderos azules?! /con gracia pueril el vocablo elevó, ahí, reincorporándose de tirón usase las palmas de apoyó qué a su criterio trémulo. quieto, arremolinase la energía de la punta de los dactilares y, justo, la dudas abrumarle a él tras encarar al culpable de sembrarle sus dudas.  no recuerdo haber visto una, pero sería curioso, oh gott.. ¡quiero ver uno! ¿me llevarás? no creo que sea taaaaan difícil, ¿verdad? 

─────　/tal pareciera que la clemencia encarnó en ecuánime tinta, pues sus fisionomía comenzó a tomar tonalidades a la vara de la justicia que reposaba en cada recoveco de él. uno de los relieves de su traje fue víctima de la incompetencia de no poder ayudar.   kurt.. tan solo llámame kurt. /entre bosquejos mentales imparables, ambarinos luceros examinaron en pendiente los rasgos del más (raramente) alto, quizá en busca de una reacción feroz. instantes después prestando atención al presente de la mencionada cuestión; sus párpados cayeron obstruyendo su mirada, hundiéndose en la penuria de verlo así y, aún recostado, se giró para quedar boca arriba.  unos maniáticos trabajadores del gobierno.. úg, se llamaban arma algo.. ¿arma d? ¿arma w? hm.. /aquello era relativamente nuevo para él, al ser una criatura de tan buena memoria pocas veces fallaba atinando a eventos propios o ajenos a él. volvió abrir las persianas del mirar, dándole formas a los celajes del cielo (figuritas, animales, objetos..) y, sonriendo al captar una que le gustó, señalandola con intención de darla a conocer.  ¡esa nube de ahí es igual a un lobo!  se parece muchísimo a tí, hasta tienen el mismo peinado ¡ja!  /ahora, ensimismado por lo que el cielo puede ofrecer se dedica a admirar todas las formas que su imaginación puede ver; infantil se podría catalogar pero, para él era una manera de distracción. 

sigo vivooo, sipiriliii.

─────　oh, ¡ahí está el detalle mein freund americano! ella es capaz de oirnos, quizá, ahora mismo este haciéndolo..  ¡llegaremos a ella con facilidad! si ella lo permite, claro.  /las cejas alzó la súbita voz; sin detonar molestia, el torso giró con levedad, y obsérvalo durante intervalo corto de tiempo, antes de volver su vista al frente. el cúmulo espesísimo de nubes plagadas de tempestades sofocantes qué, el azulado detallaba sin esfuerzo alguno, entendiendo al instante la razón de lóbregos senderos en la psique atosigada. labios presiona, al pendiente de las palabras qué esclarecen los vocablos torpes, muy diferentes a la ruda actitud del dueño.  oh, pues eso es.. complicado de explicar.  /inquiere una brizna, dónde se acentúa la mortificación aquel semblante, solidario y empático, rebosando de humanidad que empañaba el entorno en un pigmento cálido. captando la atención de quién parecía no distinguir fronteras, razas u condiciones para conectar con cualquiera que apoyo necesitase, un auténtico corazón de sangre azul... aunque la bombéase carmín.