era una noche fría, me calaba hasta los huesos y mis dientes castañeteaban sin poder detenerse. Estaba en un bosque hermoso, bueno para mi a la mayoría de las personas les daría miedo ya que no había nada que me iluminara mas que la luna, que a mi opinión estaba mas grande y brillante de lo normal. Siempre pensé en la luna como una ladrona una hermosa ladrona del brillo del sol.
Sinceramente he preferido mas la noche que el día que hasta me he pasado todo el día durmiendo para quedarme despierto toda la noche, fue en vacaciones tenia 14 años, no funciono mu bien tuve que hacer un trato con mi madre para que me dejara hacerlo toda una semana que fue en la que siquiera estaba en la casa, lo cual no fue malo, lo malo era que yo no sabia absolutamente nada de cocina y tuve que alimentarme a base de comida instantánea, digo no podía pedir comida por teléfono a las 3:33 a.m. iban a lanzar el maldito teléfono diciendo que satan los había llamado
