ପ₊˚⊹ 𝚂𝚝𝚊𝚌𝚢 ₊˚っ

Que tal un 20 de diciembre?, es una cita?

“Mentiras para los vivos, flores de amor para los muertos”
          
          Mentiras en tu forma de querer, tu falsa forma de amar. Mentiras en tu forma de pertenecer, la extrañes de tu mirar.
          
          Mentiras en tu forma de hablar, ridículas tus formas de justificar, mentiras tus formas de llorar, estúpidas tus acciones de terquedad.
          
          Espontáneas las formas orgullosas de tu silencio, absurdas las formas de tu desprecio.

—Entonces...si tuvieron algo.
          
          —Si pero fue algo que no duro mucho, ya sabes, ella esta-
          
          —¿Loca? 
          
          Katsuki e Izuku rieron por el comentario, ambos pensaban igual e incluso veían las cosas de la misma manera.
          
          —Digamos que la engañe como a todas las otras —Menciono Katsuki haciendo que Izuku dejase de reír por esas palabras.
          
          —¿Qué? —Pregunto confundido.
          
          —Bueno, como te he dicho antes, no me sentía a gusto, cómodo o satisfecho con las relaciones que llegaba a tener pero no era por que quisiera tener a una y a otra, es solo eso...
          
          —y ¿Yo..?
          
          —Contigo es diferente, contigo me siento feliz y tranquilo —Declaro desviando la mirada para que Izuku no notara su sonrojo.
          
          (A cuantas más les dijiste lo mismo....)
          
          Izuku trago duro y también desvío la mirada inseguro.

Juró que nunca en mi vida había visto un eclipse tal cual, y ahora viendo la luna ser tapada es una de las mejores cosas que he visto <3

[Faltas de ortografía/pensamiento vago]
          
          No eran celos lo que sentía, podía permitirse sentir cualquier otra cosa pero celos jamás.
          
          Era estúpido realmente.
          
          Sus inseguridades no le dejarían pensar con claridad, todo lo “supuestamente enterrado” estaba saliendo a flote para simple y sencillamente atormentarlo. Si no se sentía cómodo ¿que futuro tendría ese tipo de relación?
          
          No era eso, el de verdad lo amaba, pero la indecisión lo molestaba por las noches, el insomnio a las cuatro de la mañana era algo con lo que aprendería a vivir si su situación seguía complicándose.
          
          ¿Pena?, no lo sabía.
          
          Desde un principio lo penso, tal vez él estaba acostumbrado a otro tipo de trato, a otro tipo de personas, y es que con 10 novias anteriores ¿quién demonios no se sentiría mal?, tal vez ellas eran más bonitas, con un físico increíble y de ensueño, sin ojeras, sin feas pecas con un delicioso aroma corporal; Por algo salieron anteriormente con el rubio.
          
          Disocio muchos pensamientos, ahora era un echo, estaba completamente inseguro de si.
          
          
          

No diría que estoy dando todo a la persona equivocada, al contrario, yo soy esa persona equivocada a la que le esta dando todo pero...
          
          ¿Cómo sacar aquel amor de mi mente?
          
          ¿Cómo sacar a mi amor platónico de mis días y noches?
          
          ¿Cómo sacar ese amor no correspondido de mi pecho?
          
          Aunque es inexistente, nosotros como humanos solemos cometer errores al punto de casi matarnos por propia cuenta. Y es verdad, solemos enamorarnos de las personas equivocadas y esta bien
          
          ¿Pero sigue estando bien amar, no ser amado, y dejarte amar por alguien a quien tu no amas?
          
          Aún que la duda ronda en mi cabeza todo el día, mi respuesta sigue siendo la misma incoherencia y el tormento de mis noches
          
          “No, no esta bien. Pero si te convences de ello, podría estarlo”
          
          No hablo de un pensamiento vago o alguna idea descartada, supongo que esto es a lo que llaman “Amor de fantasía”
          
          Se siente de la mierda.

[Faltas de ortografía y anécdota por que amamos ventilar nuestra vida claro que yes]
          
          Todo se volvió confuso, las preguntas en su mente rondaban como las mariposas que escupía, no sabia si sentir miedo o temor, tal vez enojo, celos o quizá todo; sus dudas crecieron con las palabras de su amiga.
          
          —Camie-San dijo que es su exnovio, Kirishima puede confirmarlo. 
          
          Izuku sintió un balde de agua fría caer sobre si,  había dicho...¿exnovio? creo que esa fue la palabra que uso. ¿Cómo era posible que algo hací le estuviera pasando?, como es que aquella chica lo seguía atormentando aún con esa cara tan hipócrita con la que lo saluda cuando coinciden.
          
          No entiende muy bien la situación, pero no se quedaría con ese nudo en la garganta, aquella perra con los labios llenos de butox no seria un problema de nuevo, no más. Si Katsuki confirmaba lo que Izuku ya sabia terminaría con él, no quería o no lo sabia, pero no podía quedarse con el mal sabor de boca y ese horrible presentimiento en el estómago.
          
          —Tú... ¿De donde conoces a Camie? —Cuestiono lo más tranquilo que pudo—. ¡D-digo, si se puede saber verdad!....como te saludo el otro día ya sabes.
          
          —¿La de los labios grandes? —Izuku asintió dudoso, ¿acaso conocía a más de una Camie?—. No se si recuerdes que antes del examen de admisión para la preparatoria hubo unos cursos, como unas clases en linea para repasar antes del examen, bueno, ella estaba en esos cursos y cuando recién entro me envió un mensaje para saber la tarea del último repaso. Pero no paso de eso y por eso luego me saluda.
          
          [Sigue en comentarios]

Me di cuenta de que algo “Reciproco” no siempre es lo mejor, si se supone que uno esta enamorado ¿por qué se siente el corazón herido?
          
          No tiene sentido

¡Oh cupido, ¿por qué que eres tan cruel?!, el amor es tan indiferente. Las circunstancias son heridas y las heridas cicatrices.
          
          ¿Por qué eres hací?, el sentimiento más vago y lejano, no puedo tenerlo y tampoco obtenerlo.
          
          Se desbordan danzantes en un mar de pétalos, se deslizan cautelosos bajo la penumbra de la noche. ¿Por qué vivir así?, es tan injusto.
          
          Desearía acariciar tus rubios risos mientras clavas aquella flecha en mi pecho, tus palabras son veneno pero no llegan a ser un tormento.
          
          ¡Oh cupido, ¿por qué eres tan cruel?!
          
          Te llevas los pedazos de un promesa eterna, llevando consigo lo que queda de mi existir.
          
          Ellas florecen, yo me marchito, no hay delirios pero si suspiros.

Se sentía tan miserable, completamente en la miseria. No recurría hasta él solo para que se burlara, para que perdiera su orgullo rogando por algo que sabe que no le corresponde, y aunque la verdad llega a ser dolorosa debe tomarse como lo que es. 
          
          Una cruel realidad.
          
          Sin embargo, tampoco quería curarse a menos que su amor fuera algo recíproco y no la segunda opción. A nadie le gusta eso y tampoco lo quería para él, sus aires de grandeza hacía que negara las sobras del grotesco amor que su amado podía entregarle.
          
          Llora desconsoladamente con temor en sus ojos, esperando a que la dulce tonada de su corazón de fin sin poder volver a darle cuerda. Espera con ansias la tan esperada visita de la dama que lo guiará al final de su dolor, y quizá con eso, si reencarna, en otra vida..., su sentimiento pudiese ser correspondido.
          
          Lo amaba con toda el alma por que sólo significa lo más valioso para él. Si amaba con el corazón seria en vano su juramento, ya que después de la muerte, su cuerpo se pudrirá y eventualmente su amor desaparecerá. Pero, si lo amaba con el alma, incluso después de muerto podría amarle en esa y en otras vidas sin importar que.
          
          Cayo el último pétalo de la flor que reposaba en sus manos, las raíces que nacían del último sentimiento lo aprisionaban en su propio sentir, clavando cada una de sus desdichas en su pecho causando su ultimo suspiro.
          
          El cielo clamaba tristeza, la lluvia amargura y el sentimiento una flor. 
          
          Ahora ya no había razones, ya no había excusas ni disculpas deshonestas, en cada pétalo y hoja estaba grabado su nombre y el tallo emanaba su aroma. Las espinas crecían como su querer y se afilaban como su rechazo, ya no había nada que hacer. Las palabras nunca salieron de su garganta y jamas lo harán, se volverían su nueva condena y también su pesar.