angiesmileempty

[ Que no nos caché el fbi :'v ]
          
          Tenía buen rato sin poder dormir bien, extrañamente sentía su cuerpo más liviano, pero también todo a su alrededor se sentía diferente, la almohada se había hecho más cómoda y más grande, tanto que debió deslizarse para que su cabeza cayera en ella de nuevo, las sábanas le asfixiaban también, igual se habían hecho grandes. 
          
          Puede que fuera un sueño... Pero se sentía real ¿Cómo su cama podía de repente agrandarse? O quizá... él se había hecho más chico, pero eso es imposible, no podía encogerse más. 
          
          Se frotó con ambas manos los párpados, los tenia bien pegados por el sueño, abrió lentamente los ojos y lo primero que vio fueron sus manos... sus manos eran pequeñas, posó sus ojos por todo su entorno y... Gritó. 
          
          (??????)

noebroch15

Trataba de ocultar los jadeos entre sus manos, podía sentir como cada zona de su cuerpo se estremecía y empezaba a arder, incluso sentía como su sexo se calentaba. Su juicio estaba casi totalmente nublado, aún sentía que estaba haciendo algo que no debía, pero... ya no sabía si dar marcha atrás, después de todo lo estaba disfrutando.
            
            Sintió como bajaban su ropa, por un momento pensó en detenerlo pero ni siquiera se movió, sino que dejo al contrario proseguir con lo que ya había empezado. —¡Ah!— un gemido se escapó de entre sus dedos al sentir el toque de su miembro desnudo con aquella manito tan pequeña, ahora sí que se sentía como un pedófilo, pero aún así no lo detuvo pues estaba disfrutando de los suaves toques que le daban a la punta y del fuerte agarre sin mencionar aquel movimiento de sube y baja.
            
            Quiso acomodarse en una posición que le permitiera besar a su novio, pero en vez de eso sólo ahogo un fuerte jadeo, pues algo húmedo empezaba a recorrer su erección. 
            
            Alzó la cabeza y apartó las manos de sus ojos para observar que era lo que pasaba. —Án... Ángel... N... Ahh...— no podía pedirle que se detuviera, ya era demasiado tarde y la poco razón que le quedaba se había esfumado; sus caderas empezaron a moverse al ritmo de su novio, al principio con lentitud, hasta que poco a poco fue yendo un poco más rápido... Claro, hasta donde puede llegar pues ya se sentía cansado, pero eran más fuertes sus ganas de continuar que de cualquier otra cosa.
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angiesmileempty

Estaba esperando esa respuesta, más no espero que realmente se la diera, se sintió bastante acalorado por ello, sus mejillas empezaron a arder hasta sus hombros, no sabía si por la vergüenza o era la sangre caliente ¿Podía con ese cuerpo excitarse?
            
            Movió un poco aquello que se interponía entre el sexo desnudo del contrario y sus manos, la ropa, rodeándolo con sus manos y notando como se erectaba y endurecia más, empezó a mover una de sus manos lentamente de arriba hacia abajo, apretando de a poco el agarre, y con la otra libre acariciar la punta del mismo. 
            
            Quería ver más de Noel, pero no podía si este se rehusaba a mostrar su cara y tapar su boca, apenas y podía oírlo. No sabia si funcionaria lo que haría ¿Siquiera le cabía en la boca? Bueno, sólo había una forma de averiguarlo.
            
            Agachó un tanto la cabeza, acercando su rostro al miembro caliente, sacando su lengua para lamer suavemente el glande, al principio lento hasta hacerlo más rápido, humedeciendo lo más que podía para poder llevar una parte a su boca sin dejar de mover la lengua, al igual que tampoco dejaba de estimular con su mano haciendo presión.
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noebroch15

Sonrió ladinamente con esa respuesta, sintiéndose tranquilo al observarle a los ojos y admirarlo por un momento, es normal que lo haga, pero en ese momento quería hacerlo mas que nunca, quizá por como se estaba sintiendo, verlo siempre le hacia sentir mejor.
            
            Su rostro denotó sorpresa al notar las acciones contraria, estaba a punto de sentarse y quitárselo de encima hasta que sintió aquellas manitos invadiendo su intimidad. Su espalda se arqueó un poco, para luego empezar a moverse al compás de sus movimientos, —Á... Ángel...— cubrió su rostro con sus manos, no quería hacer alguna mueca o ruido que le resultara gracioso a su noviecito, no quería ser molestado por un largo rato.
            
            Debía frenar eso en este instante, no podía dejar que todo avanzara a algo más intenso, pero... se sentía tan bien..
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angiesmileempty

Había perdido la mañana, y parte de la tarde, buscando un regalo perfecto para un día como este, no veía muy especial los cumpleaños, culpa del poco interés de su padre hacia los mismos, y su anterior familia, pero por alguna razón esta vez le daba un cosquilleo de emoción y su cabeza bailaba por querer comprar algo especial y hacer el especial para su, valga la redundancia, su amigo, o mejor dicho su bro. 
          
          Era importante, de una forma indescriptible, el cumpleaños de esta persona para él. 
          
          Caminaba con ambas manos en el bolsillo de su abrigo al apartamento del mismo, en una llevaba el dichoso regalo, entrando al edificio saludando al administrador y caminando directo hasta el piso y la habitación, llamó con fuerza, haciendo escándalo sólo como él puede hacer.
          
          Extrañamente sudaba frío probablemente por los nervios, los cuales eran normales pero le daban mala espina esta vez. 
          
          [LO LOGRE]

noebroch15

[MIERDA ¡¡QUE INTENSO!!]
            
            Al ver esa cara de disgusto bajó la mirada ¿Acaso algo estaba mal en él? Pero... había tratado de ser juguetón ¿Le había desagradado? No sabía que pensar, hasta empezaba a sudar frío, hasta que vio aquella sonrisa ladina que lo tranquilizó enseguida.
            
            Abrió sus ojos con sorpresa al sentir como lo llevaban y lo recostaban al sofá, esa era una buena señal, tan buena que no pudo evitar que se le escapara una risilla traviesa. Al procesar sus palabras pudo sentir como sus mejillas ardían, y al sentir como su ropa le era arrebatada de su cuerpo y observar cómo le miraba el contrario sintió sus hombros arder, tanto como si se hubiese recostado al horno encendido que esta en la cocina de su trabajo. —Sabes que soy todo tuyo— sonrió con picardía, colocando sus brazos alrededor del cuello ajenos y acariciar su espalda con la yema de sus dedos.
            
            Al empezar a sentir el roce de su abdomen semidescubierto con el suyo y aquella mano que se atrevía a urgar entre sus muslos dejó escapar el primer gemido, arqueando su espalda para mas acercar su cuerpo al ajeno. Correspondió aquel beso con desespero, abriéndole paso aquella lengua intrusa mientras le abrazaba con más fuerza y así profundizar aquel momento aún más.
            
            Cuando aquella mano tocó su entrepierna se estremeció, pero al sentir la rodilla ajena invadiendo su intimidad empezó a mover sus caderas con cierto ritmo, suave pero desesperado, empezando a sentir un cosquilleo fascinante que se repartía por toda esa zona.
            
            Sintió sus pezones erizarse con los leves toques de su mano, al ser su boca liberada dejaba escapar el aire caliente de su cuerpo, asimismo sentía como le faltaba, pero no pararía, ya que ni siquiera quería que aquel momento terminara.
            
            —Hmmm— ruidos salían de sus labios al sentir los ajenos recorrer su piel; cuando empezó a jugar con sus pezones —¡Ahhh! ¡Engel! Hmm— su cuerpo se contraía, se estremecía, temblaba por las emociones que sentía, las caricias lo enloquecían, le hacían querer más
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angiesmileempty

Se alejó un tanto para observar, y contemplar mejor, como le había quedado aquel collar, sus ojos bajaron y subieron, se veía bien, muy bien, pero... Hizo una mueca de disgusto por un segundo y la borró casi enseguida mostrando una sonrisa ladina.
            
            Le arrastró hacia el sofá, mientras plantaba aun besos por la suave piel entre el cuello y los hombros, lo recostó en el mueble con cuidado y dejó sus manos sobre el pantalón ajeno. —Te ves bien, pero me encantaría más si sólo tuvieras el collar. —El tono de voz le cambió de dulce a uno más malicioso, no tardo nada en deshacerse del pantalón seguido de la camiseta, quedándose encima del cuerpo contrario a una distancia en la que sus ojos pudieran apreciar el cuerpo desnudo, blanco, adornado con tantas pecas y con tintes rosas probablemente acusa de la sangre caliente. —Ahora sí.
            
            No iba a hacerse de esperar, ni tampoco a su amigo, el cual también se veía tan ansioso como él por empezar.
            
            Apoyó más su cuerpo sobre el otro, dejando una de sus manos urgar por allí entre los muslos y la otra acariciando el rostro pecoso, empezando a besarle profundanente, pidiendo paso con la lengua para poder invadir mucho más. 
            
            No se había olvidado del bóxer, prefirió dejarlo un rato más, la mano libre se deslizó por los muslos hasta la entrepierna, tocando suavemente el sexo del contrario, decidió dejar a su rodilla jugar allí, rozandola con cierta presión en el miembro de este buscando excitarlo más,  mientras su mano se iba hasta el pecho del otro y así acariciar con suavidad los pezones hasta pellizcarlos.
            
            Aún besandole, bajó un poco la intensidad para moverse por la barbilla hasta el cuello, queriendo morder los hombros y dejar una que otra marca, para variar, así hasta llegar al pecho donde sus manos jugaban con los pezones ajenos, besando con delicadeza al principio sobre ellos para después chupar, mover con su lengua y como punto final morder, así hasta hacerlo más fuerte y dejarlos rojos.
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noebroch15

@angiesmileempty 
            
            Sus mejillas se sonrojaron cual carmín al ver la extraña mirada de su amigo, nunca antes le había visto así y eso... Le era extraño, no desagradable, por el contrario, le encantaba poder tener su mirada sólo para el, pero también le causaba mucha vergüenza, tanta que si fuera una colegiala ya habría corrido hacia el otro lado, pero era ya todo un hombre hecho y derecho (Sí, claro) y no podía hacer tales cosas infantiles.
            
            Su respiración se detuvo al escuchar sus palabras, ¿Acaso le estaba... correspondiendo? Eso era imposible, aunque en esta ocasión no agregaba el clásico "Bro" al final de la oración, entonces... ¿Podía tomarlo como algo enserio?
            
            Gemidos empezaban a escapar de sus labios, y no los disimulaba, pues quería disfrutar ese momento al máximo. Sus manos se aferraban en la camisa ajena, para luego soltarla y deslizar sus dedos por el cuello y cabello del pelinegro; su cuerpo temblaba, su piel se erizaba y su espalda se arqueaba, mientras que su piel se coloreaba de un lindo color carmín que poco a poco iba tomando mas fuerza. Sentía las piernas fallarle al sentir aquellos suaves apretones, pero eso sólo provocaba que los gemidos se hicieran más escandalosos y lo deseara más.
            
            Asintió ante aquellas palabras, le costaba articular alguna debido a que su mente ya estaba nublada por aquellos sentimientos que le invadían. —Hmm... sí... si es lo que deseas— dijo por fin, tratando de sonar no tanto excitado, sino que también algo complaciente.
            
            Se separó ligeramente para sacar el collar de la cajita rosa y, con mucho cuidado, rodeó su cuello con ésta, para finalmente lidiar con sus cabellos hasta escuchar aquel "clip" que significaba que estaba bien agarrado.
            
            Se dedicó a observar las iniciales por un momento, le parecía el regalo más hermoso del mundo, sobretodo porque era algo de sólo ellos dos. —¿Qué tal se me ve?— pregunto con cierta vergüenza, una que extraña vez lo invadía... Aunque trato de ocultarlo con un movimiento sensual de cabello.
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