normalmente el animatrónico diurno se sentiría extasiado por socializar con nuevos pequeños amigos, independientemente del entorno. sin embargo, esto era algo nuevo. nadie le avisó sobre el cambio de rutina, por lo que aparecer en un escenario totalmente inexplorado por él lo asustó.
a lo lejos observó a un nuevo ser, y decidió acercarse, cauteloso y ansioso, pero aún tratando de sonreír y ser amigable, como siempre solía ser.
────── ¡woah! ¡hola, hola! ¡qué sorpresa, una cara nueva! —disimuladamente le escaneó el rostro, mientras jugaba con sus propios dedos. ────── ¿p-podría saber tu nombre? ¡no es como si lo supiera! —rió un poco, intentando adaptarse a su programación, a pesar de que cierta voz lo hostigaba. ────── ¡hu-uh! ¡tambieeeén...! esto no es el pizzaplex, ¿verdad...? —su tono se tornó un poco triste, pero esperanzado de todas formas.
# buenasss, bienvenido, bienvenido. puedes llamarme geral. es un placer, sip. <)