── / era un domingo por la noche. aunque debería estar cerrado ya, específicamente este día fue haruki quien insistió en mantenerse abierto. el único trabajador del lugar, a una hora donde ni dios pasa por esas calles. y podría haber sido necesidad de cualquier tipo la razón por la que ella apareció, pero si de él dependiese, no preguntaría; vió entrar a la artista. apagó su móvil y se puso de pie, en total silencio (pareciese avergonzado, pintitas que de hecho trae siempre). estaba a nada de entablar una conversación cuándo se acerca a la caja, tenía las palabras en la boca, y esperaba algo de contacto humano antes de volver a quedarse solo, pero ¿qué podía decir?.. es casi como un fantasma。 (con un muy suave suspiro) ¿puedo preguntar si usará efectivo o tarjeta?