vas a ablandar mi débil corazoncito con tus dulces palabras, diosa mía, y ¿pesadillas? ¿fueron muy malas? sin duda son un incordio, nanana, espero que no hayan arruinado el sueño de belleza de mi reina.
por mi parte he dormido bien, extrañamente me desperté sobre las cinco de la mañana pero me dormí al instante, nada así muy importante, dimedime, ¿desayunaste?