"C-creo que ninguna... ¿Lo tendré que volver a traer?".
"Oh sí, estaba un poco fracturada de su patita izquierda pero nada de lo que preocuparse, solo tendrá que venir a revisión básica y ver que el yeso que colocamos no se infecte."- el médico dijo amable y con rapidez palpable.
"Muchas gracias en serio..." con notable vergüenza volvió a abrir su boca para preguntar "¿Cuánto será?".
El médico lo pensó con rapidez, buscando una solución viable. Estaba más que claro que aquél niño de sonrisa hermosa, por qué sí, realmente la tenía; no contaba con el dinero suficiente para pagar más de 100 dólares por la pequeña mascota. Y no quería sonar malo, pero de su profesión era lo que vivía, mucha gente buscada aprovecharse o mentía para que la paga fuera menor. Pero con este chico no era así. Desvió sus pensamientos un poco y lo que dijo no era exactamente lo que tenía planeado: "Para la siguiente consulta vemos, no te preocupes con pagar en este momento."
Por qué lo quería, era volverlo a ver.
Jungkook estaba notablemente sorprendido. Estaba (o se sentía) listo para la cantidad exuberante que llegan a ser las visitas al veterinario. Pero definitivamente no contó con esa respuesta. Con la mirada baja y sonrojo en sus mejillas, dijo: "Volveré, tenga por seguro Dr..."
"Kim, Kim TaeHyung para servirle"- con una sonrisa cuadrada y una mirada un poco coqueta pronunció lo dicho.
"Volveré, Dr.Kim"- y dentro de JungKook no podía estar considerablemente feliz, no solo por su comprensión y su belleza, si no por la gran persona que demostró ser.
Porque lo volvería a ver, y el anhelaba eso también.