Entre lo desconocido y lo anormal, el exorcista dedicaba su caminar sin un rumbo fijo, puesto que no tenía realmente donde volver en ese momento, menos en lidear con tanta gente extraña la cual se acostumbro, pero claro, la desconfianza seguía perpetúa en su corazón, con fuerza llevando la katana entre sus dedos, sus ojos clavados en posibles enemigos, ahora dado lo sucedido con su hermano menor.
Pero entre tanto problema, diviso una figura, que sin saberlo, logró calmar su agitado corazón. Sin dudarlo el Minamoto se dedicó acercar al contrario, pero claro, nunca lo haría de forma natural, espero que estuviera distraído para colocarse a sus espaldas, susurrando en su oído. ─── ¿Me extrañaste.. Akane? ───
# AHORA SI, OLA VV,
como soy mal alfa no
me presente, todo mal.
Acá soku (any pronouns)
Y tu??