—¿Alguna vez te han dicho que eres insoportable?
—Veamos, si el número Pi es tres coma uno, cuatro, uno, cinco, nueve, dos, seis, cinco, tres, cinco, ocho, nueve, siete, nueve, tres, dos, tres ocho, cuatro, seis, dos, seis, cuatro, tres, tres...
—¡Ay cállate! —Le interrumpí.
—Bueno, lo que viene después de la coma es la cantidad de veces que me lo han dicho.