Sin darme cuenta estaba llorando, mis mejillas umedecidas, mi corazon latiendo pausadamente, senti un par de miradas sobre mi pero eso no me importaba, el ya no estaba, habia partido y no volveria, me hizo prometer que no lloraria pero era una promesa absurda, el se alejaba poco a poco, cada centimetro que caminaba era una lagrima que caia y un golpe directo a mi corazon, lo extrañaria, me haria falta, volveria a estar sola y nadie me sonreiria de nuevo, el lo era todo para mi, el era la luz en mi obscuridad, la unica persona a la que le importaba, morire lentamente y nadie se dara cuenta de ello...