Más que un cantante, fue un ídolo, musa e inspiración para mi. Han pasado muchas horas desde que se dio la noticia del fallecimiento de Liam, pero mi corazón aún no lo procesa, no puede creer y no entiende cómo sucedió todo esto. Estoy devastada, cada vez que regresa la noticia a mi mente, se siente tan irreal, como una broma cruel que me da ganas de vomitar. Mi mundo no concilia que ya no esté aquí, no esté su sonrisa, su voz, sus ocurrencias, sus opiniones, todo. Y jamás regrese. Fuera de lo que sea que lo acusaban o el odio que le daban, que completamente desconozco y prefiero que sea así. A mi importaba él, no las opiniones de las otras personas. Me importaba sus proyectos y no simplemente la música, me encarecía saber cómo se encontraba de estado de ánimo; y esto es curioso porque nunca lo conocí personalmente, pero lo sentí así. Recuerdo con mucha estima cómo alegro en el tiempo de la pandemia, como seguía sacando nuevas cosas, siempre con un brillo en los ojos. Si en algún lado sigue existiendo esas memorias es porque jamás se fue de nuestros corazones. Doy condolencias a todos quienes se sientan así, a su familia y su pequeño Bear. ❤️
