No sé si todos los escritores son igual pero, yo siempre he dejado pequeños rastros de mi vida en cada historia que he hecho.
Infernum tardé años en terminarla, porque comencé cuando mi situación no era la mejor, y pasé muchos procesos de recuperación que me hicieron perder el deseo de mostrar esa oscuridad. Era como, enfrentarme a eso que tardé años en sanar.
Todas mis historias reflejan cierta parte de mí que, gracias a la escritura, he reconocido y sanado según las voy descubriendo. Creo que eso me impide borrarlas por completo. Todas son un pedazo de mi alma, y sería borrar el proceso que me llevó a ser quien soy hoy en día.
Poco a poco las iré publicando. Unas me emocionan más que otras, pero no me iré de este mundo sin haber contado mi historia y las de muchos otros