UnayJP
El extremo calor era un infierno en vida aún así no le detuvo de dar un recorrido por aquel cielo tan extenso. No conocía la zona donde se encontraba, pero tampoco le preocupaba ya que de una o otra forma regresaría sin problema. Una figura le llamo la atención por lo que batió sus alas con suavidad para aterrizar frente a él. Como era su costumbre llevaba el pecho descubierto, adornado con varias joyas, como dos brazaletes en ambas muñecas de oro, tres plumas en su cabello azabache; verde, blanco y rojo. Mostró una amigable sonrisa. —¡Hola! Soy nuevo ¿Sabes dónde puedo comer? Me muero de hambre con este terrible calor —rio