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⎯⎯⎯⎯⎯/aquellos fonetos simplemente inflaron su ego, símil al de un gallo envidioso, y tiñeron sus mejillas de bermejo intenso, tan solo atinando a soltar un pequeño quejido.  más te vale.. sí escucho qué prefieres a otra antes qué a mí.. ¡ush!  /no terminó. la simple idea la molestaba, aún cuándo fue ella quién lo sugirió en primer lugar. probablemente fue a causa de aquella situación qué los «accidentales» jalones de cabello, qué había dado durante su pequeño jugueteo en las hebras del varón, sucedieron.  {...} tras lo ocurrido, su labio inferior se abultó mientras aun yacía abrazada a él y lo escuchaba, ¡osaba burlarse de lo tierno qué lo había dejado! es un bobo, definitivamente.  ¡obviamente, dulce príncipe..! es una clara obra de amor, de lo más profundo de mi corazón.  /aparentó estar ofendida y, aún así, dejó un beso en la mejilla de él desde su posición; para así, posteriormente, dar una pequeña mordida al lugar cómo castigo.  debes apreciar mi arte y mi cariño, estás adornado cómo un bello rosal.

⎯⎯⎯⎯⎯eres.. imposible.  /por muy irónico se sonase tal delicadeza estaba simplemente rompiendo su gallardía; se sentía tan ínfima en comparación a la dulzura con la qué estaba siendo tratada y su corazón jovial golpeaba contra su caja torácica con esmero, acelerado, jubiloso. aquel hombre la volvía loca, en cuerpo y alma, y no entendía el porqué. eran varias noches dónde lo soñaba e ínfimos los instantes dónde se alejaba de ella qué podía sentir cómo eternos; y, válgame, esa labia suya lo era todo.   eres tan elocuente.. me tienes hecha una jovencita embelesada por ti, tú atención y cercanía; es imposible para mí soportarlo cuándo actúas para mi como la ambrosía lo hace para los dioses. tan dulce, adictivo, simplemente tú.  /observó sus acciones, sintiéndose tímida pero deseosa por el afecto que le daba. sus labios, para corresponder, viajan a las manos callosas por el esfuerzo con la espada, del chico, y planta un beso ahí mismo. íntimo, sus ojos sin separarse de él.  cuándo dices cosas con tanta seriedad me da tanta curiosidad, pues en ocasiones balbuceas incoherencias qué parecen ser congruentes con un semblante seguro y tono correcto.. ¡me recuerda a la ocasión, cuándo aún éramos párvulos, dónde declaraste qué nos casaríamos! sin más, lo comentaste con tú madre e incluso sirvientes con ese mismo rostro infame.  /se rió de la memoria, queriendo volver más ameno el ambiente en son de no convertirse en una una bola de nervios ahí mismo, mientras colocaba la mano de telémaco en su mejilla, pidiendo que la acunara.  siempre dices qué yo era una bola de energía, sin embargo tú.. eras algo más. pfft.

⎯⎯⎯⎯⎯eres un exagerado.. deberías confiar más en mí, ¿es qué no me quieres, ó prefieres a esas otras chicas?  /abultó el labio inferior, inclinándose sobre el hombro del varón para darle una mirada "dolida"; solo para reírse nuevamente, ¡ella le había dado más de una razón a telémaco para qué desconfiase! sería increíblemente ingenuo sino sospechase de ella, al menos un poco. volvió a ergir la espalda, sacando la lengua en un gesto de concentración pura.  por aquí..  /de sus manos surgían flores qué trenzaba en el cabello marrón. se movía de aquí para allá, quizá jalando dolorosamente en algunas ocasiones; hasta qué, finalmente, una sonrisa esclareció en sus labios. se abrazó a él, riéndose por su hazaña.  ¡te ves tan lindo..!  /tan lindo qué era ridículo; las trenzas no tenían sentido y las flores desbordaban de sus hebras. 

⎯⎯⎯⎯⎯/la sensación de los labios del hombre se plasmó cómo vestigio de almíbar en sus falanges, qué bien parecían relajarse ante la acción; si bien era a causa del creciente bochorno en sus mejillas, no lo iría a admitir. le subiría demasiado el ego a su dulce y preciado amigo.  .. pfft—  /sostuvo una gracil risa ante la mención hecha, dejando de lado tal nerviosismo; su diestra cubrió sus labios, tratando de qué no sonase cómo burla.  ¿cómo uno de esos relatos dónde el héroe rescata a la damisela..?  /comparó, sinceramente enternecida, antes de asentir para sí misma; sus falanges ahora pellizcaron dulcemente la punta de la nariz de telémaco.  te creo.. o bueno, ¡más vale! me tienes atada a ti cómo ácaro a telas preciosas, ¿me oyes? te prohíbo deshechar nuestra promesa.  /se derritió en su tacto, sintiéndose perfectamente mimada en aquel momento; y, en cambio, tomó su rostro con cariño, solo para plantarle un delicado beso en la mejilla, uno más en la nariz, y otro final en su frente.  eso haremos.. gracias por consolarme, telémaco. incluso cuándo tú también estás afectado, yo— ¿fuí demasiado egoísta?

⎯⎯⎯⎯⎯/disfrutaba todo de él y, vaya, eso claramente incluía el sonido de su voz; desde el más lamentable, hasta el más símil al almíbar del sosiego. rió ante la vacilación de él y negóse a las acusaciones entre líneas, abrazándose a su brazo cuándo escuchó el permiso otorgado.  ¡pasarme de lista, dices! para nada, sabes qué sería incapaaz..  /aquel último tono podría haberse escuchado sospechoso pero, antes de empeorar la situación, gateó para colocarse atrás de telémaco.  mh.. mMmh..  /sus falanges comenzaron a trenzar con delicadeza las suaves hebras del varón, deshaciendolas casi al segundo.  ¿qué podría haceer?

⎯⎯⎯⎯⎯/cuándo ambos cuerpos se apartaron, si bien fuesen un par de centímetros, el vehemente deseo de aferrarse a él surgió nuevamente en la psique de la rubia. se sentía tan cálido qué en cualquier otro momento podría haberse soltado a llorar tan pronto experimentara cómo los brazos de Telémaco la envolvieron de tan bella forma, haciéndola sentir vulnerable; sin embargo, se reprimió y sostuvo la mirada que le era brindada para cerciorarse de qué estaba ahí, sus clisos, tan símiles a piedras preciosas, se entrecierran y vuélvelos rendijas qué analizan detenidamente las facciones del varón con la mayor ternura qué podía divisarse; sin más, desliza sus manos fuera del cuerpo de él y, con la delicadeza que trataría los pétalos de sus flores más hermosas, lleva sus palmas a su rostro para acunarlo amorosamente. sonríele con gracilidad.  lo sé. sin embargo, aún siento temor.. ¿qué habría de hacer yo sin ti?  /las yemas de sus trémulos pólices acarícianle la dermis de los pómulos mientras su entrecejo se relaja; probablemente estaba pensándolo demasiado, no, lo ESTABA pensando demasiado, pero no habría podido calmar tal ansiedad de no haberlo visto segundos atrás. él, quién era una columna fundamental en su vida, había calmado su inquieto corazón sin mencionar una sola palabra. qué poder más grande poseía.  estaba tan preocupada.. lamento sí mi sensibilidad es incomoda, es solo..  /su labio inferior se abultó un poco mientras de sus lagrimales comenzaban a brotar ínfimas gotas; al ser una mujer emocional, no era la primera vez qué rompía en lágrimas frente a él, pero eso no quitaba la sensación de qué probablemente estaba siendo una molestia.  olvídalo.. ¿has visto a tus padres..? también estaba buscándolos, pero no les encontraba pista alguna.