Idxnt_smokeee
Para Arthur, las palabras nunca habían sido un problema en su vida. Siempre sabiendo qué palabras usar y cuándo usarlas. Aunque claro, una cosa era escribirlas y otra muy diferente era hablar directamente, sin guiones o borradores de por medio.
Los ojos ámbar de Arthur salían de su libro hacia su pareja, con quien ahora estaba compartiendo un momento cálido entre la comodidad de la cama. El clima de afuera con una tranquila pero constante lluvia fue perfecta para que ambos pudieran simplemente acurrucarse entre las sábanas mientras compartían tiempo en silencio. Sin duda de las actividades favoritas de Arthur, pero con una inquietud en su cabeza tras querer dar un siguiente paso aquella tarde. Irónico y que pese a haber charlado ya varias veces del tema, cierta vergüenza por hablar de ello seguía estando presente.
⸻ Paul, tú... ¿Recuerdas lo que habíamos hablado la otra vez? ⸻ el azabache interrumpió el silencio con una voz dudosa pero no tímida ⸻. Sobre lo de tener intimidad, nosotros ⸻ vaya que sonaba tan anticuado hablando de esa manera.
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@torturedpoet- Las palabras de Paul siempre habían funcionado como una melodía tranquilizante para Arthur, bastante funcional para momentos como éste donde el temor a una nueva experiencia se daba. Por supuesto, Arthur no era nada inocente, ya ambos con anterioridad hablaron de éstos temas y lo que sabían, no era poco pero vaya que la experiencia era nula a diferencia de saber la teoría. Estaba alegre de poder sentirse seguro de tener nervios, de no verse ridículo o vulnerable con ése pequeño miedo gracias a las dulces palabras que Paul siempre se había encargado de compartirle y de trabajar su confianza junto a él día con día. Sin dudas no hubiera podido escoger mejor pareja que él. ⸻ Eres todo un amor, Paul... ⸻ un jadeo acompañó sus palabras, que lejos de ser una mala señal le pedía a Arthur más del tacto de su amada pareja. Quería estar más cerca de Paul, sentirlo junto a él ⸻. Paul... ⸻ volvió a llamarle ⸻ ¿Podías seguir tocandome así...? ⸻ Arthur pareció cortar sus palabras durante unos momentos buscando la forma de pedir que las manos de Verlaine continuaran su paseo por su cuerpo ⸻ y— no tendría problema si quieres tocar más, ¿Sabes? ⸻ una de sus manos se dirigió hasta el rostro de su amado, dejando un suave beso en sus labios ⸻. Quiero que también sepas que para mí es importante que los dos disfrutemos de ésto, ¿Sí? Si en algún momento quieres detenerte o si alguna de mis peticiones no te agrada... Puedes decírmelo, Paul. Te amo y no quisiera hacer algo que no te guste tampoco.
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poco a poco, a un ritmo lento pero seguro, las manos del rubio comenzaban a pasear dulcemente por el cuerpo ajeno, trazando la curva de su cintura y un poco más allá.
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@Idxnt_smokeee ㅤ✧ ⸻ era de previo conocimiento que el aire tenía un aroma distinto el día de hoy, no solamente por la calidez que abundaba en ambos, sino también por la tentación que se disfrazaba de una dulce invitación a pecar. para verlaine, arthur siempre habia sido el ser humano más dulce que sus manos habían tocado, una delicia hecha de ámbar y poesía, capaz de envolver a cualquiera; por eso mismo, la idea de tener intimidad con él comenzaba a mecerse en su mente, picando su curiosidad y metiéndose por recovecos que verlaine no sabía que existían. él nunca tenía pensamientos de índole sexual o sensual, hacia nada ni nadie, pero la idea de poseer a arthur en términos físicos y emocionales, lo estaba emocionando a un grado casi aterrador y desconocido. se había perdido en aquella clase de pensamientos, experimentando cosquilleos extraños que nunca antes se le habían presentado. al volver a la tierra, devolvió con dulzura el beso que su novio le daba, hundiéndose en aquellos pomposos y rojizos colchones de amor que eran sus labios. ㅤ⸻yo... hm, nunca supe qué se hace en este tipo de situaciones. ⸻comentó, evadiendo la mirada ajena a la par que sus mejillas se tintaban levemente⸻. pero si puedo complacerte, hacerte feliz y que te sientas bien... claro que acepto. volvió a conectar sus pupilas con las de su pareja, regalándole una tierna sonrisa, que a su vez cargaba con una leve timidez y vergüenza; el mismísimo paul verlaine, ¿avergonzado? sonaba casi como un sueño febril, algo que se asemejaba más bien a una profecía que a una realidad. sin embargo, se puede suponer que ese es el efecto, la consecuencia y propósito de arthur rimbaud; constantemente acelerar el corazón de paul, regalándole experiencias tanto profundas como embriagantes, a la par que coronaba su mísera existencia con una humanidad cargada de emociones y placeres a descubrir.
