No sé siquiera porque tardé en escribirte: pena, dolor, vergüenza, todo se me juntó tanto que ni siquiera sé que siento. Nunca pude elogiarte como quería, me enseñaste tu medalla de esgrima y no supe que decirte, cada logro tuyo es maravilloso, pero aún hoy no sé como expresar lo tan orgulloso y feliz que estoy por tus logros y talentos. Eres maravillosa, importante, fuerte, resistente, empática. Pero sigues siendo una niña, cometerás errores y eso está bien, pero comprenderás que las personas nos alejamos y no sabemos que hacer después de una serie de comportamientos dudosos. Acepto que no soy buena influencia para ti, te metí en un ciclo donde te cortaba y luego volvía a hablarte como si nada. Me alegra que decidieras cortarme, sabes poner límites. No voy a hacer multicuentas, no voy a hostigarte porque apenas has superado la pubertad para entrar a la adolescencia, lidiar con un adolescente que pronto tendrá mayoría de edad no será bueno ni para ti ni para mí, porque como ya dije, no soy una buena influencia para alguien que apenas está sabiendo regular sus emociones y pensamientos. Pero existen los límites, no sé si habrás llegado a leer esto y hasta el final, si no lo has hecho, está bien, te debo una disculpa por sí el traductor falla y no te da una buena traducción de esto. También te aclaro que bollo solo me hizo el favor de entregarte esto, no quiero que tu amistad con él se vea afectada por mi culpa. Tal vez me dolió dejarte, pero sé que si es por tu bien, aún si no hay "razones de peso" para dejarme de hablar, no debo interferir ya si me has puesto un alto. Eres inteligente, pero sigues siendo una niña. No te saltes etapas, no te fuerces a nada, no te dejes influenciar por gente mala, come bien, persigue tus sueños, esfuérzate, toma descansos si los necesitas, válida tus emociones, aprende de tus errores, etc.