Bendito sea el meteorito que cayó sobre la tierra prehistórica diezmando los animales que se convirtieron en fósiles y luego el petróleo que se extrajo y se usó en la fabricación del combustible que suministró el carro de cemento para hacer el hospital en el que naciste.
/no puedo evitar mostrar una pequeña sonrisa ante cada beso que le era depositado por su novia, sintiéndose tan cuidado y querido por ella, correspondiendo al instante al recibir el último beso en sus labios, el cual estaba cargado de amor por parte de ambos, atrajo suavemente la anatomía de la menor mientras aprisionaba suavemente sus labios entre los propios como una suave caricia.