–Y cuando menos te lo esperas llega ese amigo, que de alguna forma te hace ver que los verdaderos amigos si existen, aunque son muy pocos pero existen.
–Pero yo aún no tengo un verdadero amigo, y siempre lo he estado buscando... –Dijo cabizbajo
–Pero, ¿a caso tú has intentado ser tu propio verdadero amigo? –Dije tomándolo de las manos.