es bastante curioso, cuando se hace una autopsia, se extraen los organos, se pesan, se cortan y se colocan en una bolsa de plástico, incluyendo el cerebro y la lengua. una vez terminado este proceso, colocan todos los organos no dañados y sin anomalías en la cavidad torácica. entonces, cuando estás enterrado, tu cerebro en realidad está en tu pecho, y tu cráneo permanece vacío.