ironiccangel
habían pasado un par de días luego de aquélla discusión con el moreno, la cual, en realidad, había sido ocasionada por él y sus actitudes defensivas que solía utilizar con el chico; la gota que rebalso el vaso fue cuando por defender su orgullo, le grita cruelmente que no quiere volver a verle. desde ese momento, sus días se volvieron relativamente aburridos, observándolo desde lejos como aún visitaba el club y esperando que por arte de magia se dirigiese hacia él, cosa que nunca ocurría.
no fue hasta ése día todo se fue definitivamente a la mierda, al menos para él. la escena frente suyo era sobre yaren junto a una de sus compañeras, sin saber de que hablaban en realidad pero se podía notar que al menos era algo agradable para el moreno. aquéllo le provocó una profunda molestia, dejando resbalar el vaso que en sus manos sostenía. notó una mirada furtiva del chico a su dirección, aprovechando aquéllo para inclinarse sobre el mesón y sujetar a un extraño por el cuello de la camisa, atrayéndolo para besarlo. su ceño fruncido no pasó disimulado, notándose el repudio por tal acción pero logrando hacer que pasase por alto su disgusto, sólo fingiendo.
ironiccangel
no sabía cuánto había bebido, sólo recordaba que de las tres bebidas, dos de ellas fueron ingeridas de inmediato para ayudarse a olvidar los celos y la escena que acababa de ver. después de éso, se dispuso a beber todo lo que encontró en aquél bar vacío. latas de cerveza y refrescos desaparecieron de la heladera, otras botellas de licor fueron bebidas a medias; terminando regadas por todo el suelo. el alcohol realmente le sirvió de incentivo para permitirse soltar sus emociones; ayudando a que en vez de reprimir sus lágrimas, comenzaran a resbalar sin parar por sus mejillas. balbuceos bajos y sin sentido se oían por la habitación, sollozos que llamaban al moreno y luego se callaban lanzándole uno que otro insulto para balancear sus palabras.
sus ojos se abrieron al oír la voz de la persona a la cual le lloraba, casi como si le hubiese invocado. despegó su rostro del mesón, alzando su cabeza para buscarlo con la mirada hasta que dio con él. sorbió ligeramente la nariz y las lágrimas volvieron a caer, frunciendo el ceño.
──── espero que te hayas divertido con ella, seguro que la pasaste mejor que conmigo, ¿no?, por tu culpa tuve que besar a ése asqueroso. ───acusó, apretando la botella en su mano temblorosa y dándole un rápido sorbo.
yarenwisinn
@theironicangel ) estaba totalmente alterado, ansioso y hasta preocupado, ¿realmente al albino le importaba tan poco lo que él sintiera? sí, le había dado claras señales de que lo suyo no tenía futuro, de que él no cumplía con ninguna de las expectativas que el más bajo tenía, pero realmente le amargaba pensar que no tenía ni una sola chance, que no sintiera ni un apice de cariño hacia su persona. no hizo mucho con la conejita, más bien la utilizó como una consejera. la muchacha, aparentemente conociendo al albino, le recomendó confrontarlo nuevamente. "si tanto te gusta, ve por él", dijo ella. y, oh, él fué en su búsqueda. tardó un poco pues no daba con su paradero, tuvo que pedir indicaciones hasta finalmente encontrarle. aunque fue particular, pues no esperaba la escena que lo recibió. tuvo que hacer un poco de fuerza para abrir la puerta, pues parecía que la habían cerrado con intensa rabia. dentro del lugar sus ojos se posaron sobre un ancel inestable, más de lo habitual. una botella a medio tomar en el suelo, otra en sus manos temblorosas. parecía estar temblando, entre enfadado y triste, sus ocelos llorosos llamaron en potencia la atención de yaren, logrando también que la preocupación floreciera. aún estaba enojado por el beso que presenció, pero otro sentir era más potente. ──── ancel..─── le llamó, suave. se acercó, pero absteniéndose de tocarlo, por mucho que quisiera asfixiarlo entre sus brazos.─── ¿qué te pasa, bonito? no deberías estar tomando así.
ironiccangel
ancel abrió ligeramente sus ojos al observar aquélla acción, sus ocelos se dirigieron a las manos que se encontraban juntas y el susurro que le había dicho a la chica. ¿sirvió de alivio? definitivamente no, sus celos y malestar no hicieron más que aumentar. se apartó con asco del hombre que acababa de besar, lanzándole un puñetazo limpio en el rostro sin razón alguna sólo porque sentía la necesidad de desquitarse con alguien. ignoró las quejas del hombre a su persona, tomando sin más tres botellas al azar de alcohol y sujetándolas entre sus brazos. enrabiado salió del bar con el licor, a pasos rápidos y pesados para advertirle a cualquiera que le viera que no se acercara.
subió las escaleras y se adentró en el bar del segundo piso, cerrando la puerta con una patada y aventando las botellas sobre el sofá, sólo tomando una de ellas y abriéndola para comenzar a beberla con rapidez; realmente no solía beber alcohol ya que le era desagradable, pero en ése momento no encontró ninguna otra solución más que comenzar a beber para olvidar el mal rato que estaba teniendo.