Nuestra extraña unión

Doflamingo x Luffy +18

Pedido de palomakitzune

El mundo ha cambiado mucho desde que nací... Entre guerras, política, economía y miles de cosas más, creo que nada fue más sorpresivo que la aparición de "híbridos" humanos y animales. "¿Cómo es posible?" Fue una de las primeras cosas que me pregunté... Pero, siendo sincero, ya ni siquiera parece descabellado al pensarlo.

El mundo estaba muriendo, los recursos acabándose, los humanos estábamos acabando con todo... Muchos animales se habían extinto, ya casi no quedaban especies... Y, de la nada, los híbridos comenzaron a aparecer, repoblando el planeta de esas criaturas que ya habían desaparecido... Sólo que ellos tenían características humanas también. ¿Bestialidad? No. No era posible que una persona embarazase a un animal, o viceversa. Después de mucha investigación, se descubrió que los Híbridos habían evolucionado por una extraña mutación nunca antes vista... Tal vez provocada por la misma Tierra.

Al principio hubo un gran problema... El tráfico de esas criaturas se volvió una realidad que nadie sabía como lidiar. Entre religiosos que cortaban las partes animales de ellos, cazadores que los exhibían como trofeos y quienes los compraban para hacerlos pelear entre ellos... Finalmente, tras mucho tiempo, se determinó que los híbridos tendrían casi todos nuestros derechos, excepto por unos pocos, pues no eran tan inteligentes como para poder cumplir.

Gracias a la alta demanda, la curiosidad y al deber de protección de las personas, se permitió la compra de algunos especímenes, a cambio de una estricta política de cuidado, la cual se hace cumplir por medio de visitas sorpresivas cada poco tiempo. Los millonarios fueron los primeros en adquirirlos como objetos decorativos o mascotas, algo que terminó por provocar el arrepentimiento de muchos, pues... Eran mitad humanos, así que sus gustos exigentes, el vocabulario y otras cosas hicieron que tuvieran que seguir manteniéndolos de mala gana.

Hace no muchos años, híbridos y humanos comenzaron a enamorarse entre ellos, lo cual terminó con una ley que permitía casarse, siempre y cuando ambas partes estuviesen de acuerdo y entendieran perfectamente qué pasaría. Claro, siempre están los tarados que se oponen a todo, pero son una minoría que está desapareciendo.

Yo soy un hombre acaudalado, de renombre mundial, junto a quienes portan mi apellido, quienes considero mi familia o amigos más cercanos. Entre todos ellos, hay dos que destaco por ser de mi círculo íntimo... Un idiota sin mano y otro tarado de cabello morado. Ambos con híbridos, así que... "Cómprate uno de una vez, que la soledad te está dejando calvo." Maldito cocodrilo de mierda.

Después de eso, comencé a buscar alguna especie elegante que me hiciera compañía... Y me decidí por un pantera macho. Sigiloso, cauteloso, silencioso, imponente, serio... Salió todo lo contrario. Llegó un joven híbrido muy bullicioso, descuidado, desordenado y desobediente... "Luffy". Las burlas por parte de los dos estúpidos no faltaron, cuando se dieron cuenta de lo que pasó.

—"Debiste inclinarte por un halcón."— Dijo el tarado sin mano, mientras observaba a su híbrida. Una mujer de cabellos negros, ojos azules, alta y delgada.— "Robin se queda todo el día leyendo, así que no tengo problema con ella."

—"O tal vez una gata, si querías un felino."— Respondió el otro idiota de cabello morado y cicatriz en su ojo derecho.— "Nami tiende a pasarse todo el día en la bóveda del dinero, nadando en billetes.

—Cállense de una puta vez.— Recuerdo haber respondido... Yo quería un híbrido felino extravagante...— Perra suerte.

Al principio fue un caos hacerme cargo de Luffy... Tenía que gastar un dineral en carne, muebles nuevos (porque el desgraciado arañaba todo), ropa nueva cada vez que se le daba por correr entre las plantas que lo arañaban de vuelta... Después de algunos años, se volvió un poco más calmado, conservando su inocencia al igual que su extrema curiosidad.