Lobo y Cordero

1.2K 158 65
                                    


Mientras Raúl se duchaba en la ducha de la casa de Auron, Auron estaba ordenando todas las cosas del inventario. Últimamente su casa había tenido bastantes robos y había tenido que aumentar la seguridad, cosa que no le hizo ninguna gracia. Tenía que recurrir a una nueva forma de colocación sobre todos sus objetos para que estuviesen a salvo y seguros. Cada vez que surgía algo, como un robo o una explosión, tenía que cambiar entera la organización de toda la seguridad para asegurarse de que no se volviese a cometer crimen alguno, aunque casi siempre veían algo para romper su seguridad. Raúl le había dado buenos consejos, así que había conseguido corregir varias brechas en la seguridad.

— ¿Has terminado ya? Si no tienes nada que duchar, eres enano. — Nada más decir esto, Auron se rió. Justamente después, salió Raúl con una toalla alrededor de la cintura, con el ceño fruncido.

— ¡Enano lo que tienes ahí abajo! — Mientras se dirigía a la cama para comenzar a vestirse con la ropa que había depositado previamente ahí, Auron le toma de la toalla y se la quita, dejándole completamente desnudo.

— ¡Pero qué haces puto loco! — A Raúl no le parece bien desperdiciar energía en recuperar la toalla, así que se dirige a la cama y comienza a vestirse. Todo este suceso estaba siendo visto por las ventanas por uno de los individuos más peligrosos que podía existir en el pueblo.

Cuando terminó de vestirse, tomó la mochila con las cosas que había metido los días anteriores y se la colgó en la espalda, acomodándola para que no molestase al salir a caminar.

—Calvo, salgo, intenta no matar a nuestro hijo. — Auron alzó una ceja cuando mencionó ese "nuestro hijo", pero Raúl no le dio importancia a ese gesto que parecía ser de burla o de molestia de su yo de Karmaland.

—Ten cuidado, no quiero que mueras. Esa mochila me costó mucho hacerla. —


...


Después de un rato explorando los alrededores de Karmaland, se sienta bajo un árbol a descansar un poco los pies, le empezaban a doler. Nada más sentarse, nota una presencia cerca de él, pero cuando mira alrededor, no ve a nadie, así que pasa de ello y cierra los ojos.

Cuando los abre, ve a una persona delante de él. Iba a tomar la espada que le había dado Auron de la mochila, pero no puede mover las manos. Gira la cabeza como puede y ve que tiene las manos y los tobillos atados.

— ¿Me has atado porque tienes miedo de que te reviente a puñetazos? Espérate un segundo, que me libero y te rompo la cara esa de mierda que posiblemente tienes bajo esa máscara tan ridícula. — Después de un espectáculo bastante ridículo, que duró varios minutos, para. Se veía que no se podía liberar de las cuerdas que le aprisionaban.

— ¿Ya paraste, querido? Mucho mejor. — El que le había conseguido atrapar tenía un acento francés realmente cutre, notándose a la perfección que estaba completamente fingido.

— Te voy a destruir y- — Una cinta americana en su boca le calló. Aunque intentaba hablar, no lo conseguía. Hacía muecas tan divertidas que el desconocido se rió.

— Me encanta robar las propiedades de la gente, especialmente las de Auron. Creo que eso te incluye a ti, mon amour. Soy Lobo Nocturno y tú vas a ser mi dulce corderito. — Con una sonrisa en sus labios, ocultos bajo aquella máscara, desapareció en la noche con Raúl sobre su hombro.


Y este fanfic ha vuelto a seractualizado.
Estuve mirando los comentarios de los anteriores capítulos, y como todosquerían que la próxima interacción fuese con Triple 7, aquí los tenéis.

Feliz Navidad a todos ✨


Dentro de Karmaland [Auronbowl]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora