Gran Rey demonio [Terminada]

CAPÍTULO 116

EN REALIDAD SOY UN NIGROMANTE!

¡Date prisa, mata a ese loco! grito el espadachín caído.
¡Cállate! El espadachín, que estaba caminando hacia Han Shuo, repentinamente giro su cabeza y miro fríamente al hombre detrás de él, diciendo
con una voz tajante, Te asesinare también si sigues gritando cosas sin sentido.
La persona en el suelo de repente se congelo y utilizo un aspecto completamente extraño para mirar a su compañero. Pregunto confundido,
Fronze, ¿qué te ocurre?
Fronze, quien había sacado su espada y caminaba hacia Han Shuo, tenía una mirada de excitación y codicia en su rostro. Su mirada se centró solo
en Han Shuo cuando abrió la boca para decir con emoción, Voy a ser rico. Sera mejor que no te metas en mi camino, o te dejare morir junto a él.
La persona en el suelo finalmente entendió lo que estaba pasando en ese momento. Fronze en ese momento se había ahogado por la codicia de
su corazón y no tenía pensamientos para su compañero en su mente ahora mismo. Lo que quedaba era solo su deseo de volverse rico.
Su cerebro estaba pinchando de dolor, Han Shuo lentamente estaba despertando de su estado demoniaco, después de experimentar un breve
periodo de nebulosidad, Han Shuo recordó todo lo que había ocurrido hasta ese momento e inmediatamente entendió lo urgente de la situación.
Los trofeos que fueron cosechados de la Medusa y el Fruto de Dagmar me pertenecerán muy pronto. ¡Vete al infierno, malvado y loco desquiciado!
La mirada de Fronze se clavó con firmeza en el anillo espacial en la mano de Han Shuo mientras decía con una mirada oscura de excitación.
Fronze alzo la espada larga en su mano tan pronto como termino de decir eso y apuñalo hacia el completamente inmóvil Han Shuo. Parecía que
Fronze planeaba tomar la vida de Han Shuo primero, antes de tomar el anillo espacial para analizar el contenido de su interior.
Han Shuo rápidamente recito un encantamiento, y una daga de hueso bruscamente bloqueo la espada en la mano de Fronze que apuñalaba hacia
el pecho de Han Shuo. ¡En realidad, soy un nigromante! Han Shuo miro extrañamente y murmuro fríamente al sorprendido Fronze.
La daga de hueso avanzo mientras Fronze retrocedía involuntariamente, asustado. Un pequeño esqueleto, llevando un enorme parche sobre un
ojo, rápidamente se acercó a Fronze con su daga de hueso. El heroico pequeño esqueleto asesino al previamente herido combatiente en medio de
una ola de choques metálicos.
El otro espadachín gravemente herido, que había estado clamando por la muerte de Han Shuo antes, naturalmente encontró el mismo destino. El
pequeño esqueleto también lo mato cuando la orden le fue dada.

A partir del momento en que ese grupo de personas apareció, estos habían usado acciones básicas y despreciables para lidiar con Han Shuo. No
mostraron ninguna amabilidad a través de todo el proceso. Han Shuo no era un niño ingenuo e inocente y naturalmente entendió que un ojo por
un ojo era la acción más adecuada para tratar con ellos.
La aparición del pequeño esqueleto salvo a Han Shuo de una muerte inminente, y altero completamente la situación original. La daga de hueso
que manejaba el pequeño esqueleto maniobro con maestría los tres cuerpos y recolecto todos los objetos de valor de estos cadáveres, ayudando a
Han Shuo a almacenarlos dentro de su anillo espacial.
De los tres, solo el mago adepto de trueno tenía algunas pertenencias valiosas, que incluían un costoso bastón mágico. También había algunos
cientos de monedas de oro y dos o tres núcleos de criaturas mágicas de nivel tres y cuatro. Aparte de una espada de mala calidad y algunos
pedazos rotos de monedas de oro, los dos espadachines no llevaban nada más con ellos.
Recostado apáticamente en el suelo, el raciocinio de Han Shuo se había hundido inmediatamente en medio de una violenta sed de sangre al entrar
en el trance demoniaco. Era imposible para el despertar antes de que el yuan mágico y la energía en su cuerpo estuvieran exhaustos. Esta vez, no
solo Han Shuo había gastado completamente su yuan mágico después de entrar en el trance, sino que su cuerpo también sufrió de varias clases de
heridas. Esta fue una de las ocasiones en las que había salido seriamente herido. Él estaba aún peor que Odysseus, quien había sufrido de un golpe
de la mantícora.
Era algo bueno que la tenacidad de Han Shuo era algo que Odysseus no podía soñar en alcanzar. Por lo tanto, aunque Han Shuo era tan horrible
como un necrófago en ese momento, y su cuerpo estuviera tan débil que incluso no podía lograr levantarse, Han Shuo aun entendía la condición
de su cuerpo dentro de su corazón y sabía que incluso sin la ayuda de ninguna medicina, el sería capaz de recuperarse dentro de un corto periodo
de tiempo.
Han Shuo no había revelado su identidad como un nigromante en todo ese tiempo debido a que ocultar algunas de sus fuerzas podrían salvar su
vida en momentos críticos. Si no fuera por el hecho de que el aún tenía algo de fuerza mental que pudo usar cuando se enfrentó a sus atacantes
en esta ocasión, le habría sido verdaderamente difícil escapar de la muerte. Si esas personas hubieran sabido que Han Shuo también era un
nigromante de antemano, entonces la conclusión de la batalla no habría alcanzado el nivel actual.
El canto otro encantamiento mientras varios zombis y esqueletos guerreros de repente aparecieron a su alrededor. Estos levantaron sus armas y
rodearon a Han Shuo, planeando manejar cualquier cambio que pudiera ocurrir.
Después de despertarse, Han Shuo inmediatamente se conectó con los demonios originales y confirmo a través de ellos que Trunks, Aphrodite, y
los otros ya se había reagrupado y lo estaban buscando por esa área.
Ahora que Han Shuo estaba increíblemente débil, él no se podía mover y no podía hablar en voz alta, pero tenía una gran cantidad de criaturas
oscuras que él podía usar. Después de dar su orden, el pequeño esqueleto creo una gran perturbación enviando arbustos y hierbas a volar por
todas partes.