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Contexto: Eres una chica buleada por varios de tu casa, hasta que una persona peculiar se da cuenta de tu existencia.


Me encontraba sola en los pasillos, generalmente iba a la torre de astronomía, estaba cansada de que en  mi propia casa, se burlaran de mi es decir suficiente tenia con mi familia, quien quería que fuera algo que no quería

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Me encontraba sola en los pasillos, generalmente iba a la torre de astronomía, estaba cansada de que en  mi propia casa, se burlaran de mi es decir suficiente tenia con mi familia, quien quería que fuera algo que no quería.

fue ahi cuando lo vi por primera vez, a un chico de mi misma casa, solíamos compartir muchas clases juntos pero el nunca me notaba ¿Por qué lo haría ahora? era imposible que alguien como el se fijase en alguien como yo, el al notarme se reincorporo pues estaba sentado recargado en la fria pared.

-¿Que haces aqui?.

-Lo mismo pregunto, draco ¿no es asi?.

-Si, ¿y tu eres?.. -pregunto mientras se tallaba los ojos-

-Soy sydney jones, estoy en tu casa no creo que lo hayas notado.

-Para serte sincero no, me voy de aquí por cierto. -se retiro de ahi pasando a un lado mio-

volteé de reojo para verlo marcharse, últimamente lo notaba extraño, no era el mismo draco que solía burlarse y molestar a los de primero, corrí hacia el y sonreí el me devolvió una pequeña sonrisa.

-¿Pasa algo contigo?

-¿De que hablas? ni siquiera te conozco maldita acosadora.

-Que amable eres, ya veo porque tienes muchos amigos, y no te estaba acosando imbecil intento ser amable. -Pare de caminar y me fui a la dirección contraria a el-

Me había quedado dormida en el sillon de la sala en comun cuando sentí que me empezaron a mover, mierda ¿nunca me librare de pancy y goyle? siempre me molestaban y estaba harta pero cuando me levante y abrí los ojos lo vi, vi a draco sentado a un lado mío.

-¿Que quieres? -pregunte de mala gana-

-Disculparme por lo de hace un rato, es decir intentabas ser amable.

-¡Vaya! gracias por darte cuenta, no todas las chicas estan a tus pies malfoy no soy una de esas niñas huecas.

-¿Podemos empezar desde el principio?

-Esta bien, soy syd como podrás notar somos bastantes diferentes, así que no te ilusiones mucho, porque no soy una modelo, solo soy yo.

-¿A que te refieres?.

-Se cual es tu tipo, es decir buscas amigos como tu, brabucones soy lo contrario de hecho soy la que recibo insultos, en especial de tus amigos y tu novia.

-¿Novia? -Rio- 

-Pancy, esa maldita niña siempre me hace la vida imposible.

-Ya, entonces les diré que no se metan con mi nueva amiga. -sonrio-

-¿A cambio de que? no sabia que eres amable.

-Bueno, yo no sabia que tu no existías. 

Los días pasaron, solía escabullirme a la habitación de draco mientras comíamos dulces de todo tipo, draco se había convertido en mi mejor amigo, estábamos riendo de sus chistes malísimos.

-Cuéntame de tu familia. 

-No quieres saber de mi patética familia. -pare de reir-

El noto que cambie la cara al hacerme la pregunta disculpándose enseguida, me sobo la espalda.

-Ellos quieren que sea algo... que no quiero ser.

-Si te sientes segura puedes decírmelo.

-Una maldita mortifaga, por merlín no quiero.

-Me pasa algo igual, provengo de una familia de mortifagos asi que ellos esperan que no los decepcione y sea igual que ellos.

-Temo en decepcionar a mi familia, pero no quiero ser una mortifaga.

Draco me abrazo y deposito un beso en mi cien, me consoló por un momento y después me miro a los ojos, fue ahí cuando mire a sus orbes que estaban dilatados, me acerque a el, y el hizo lo mismo y nos dimos nuestro primer beso.

Años después tuvimos a nuestro primogénito, ambos decidimos no enseñarle lo que nuestros padres a nosotros, el nunca juzgo a nadie por su sangre.



•𝕯𝖗𝖆𝖈𝖔 𝕸𝖆𝖑𝖋𝖔𝖞 𝕺𝖓𝖊 𝕾𝖍𝖔𝖔𝖙𝖘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora