Antes de llegar al castillo comencé a recordar algunos relatos que mi papá me contaba sobre grandes magos que existieron en la historia, pero hubo uno que me llamó la atención cuándo era una niña pequeña él me contó sobre un niño que había sobrevivido el maleficio asesino. A mi parecer era algo muy sorprendente y cada día me encantaba escuchar esa misma historia pero era evidente que no era correcto mi interés y asombro ante aquel niño, que era enemigo de la oscuridad. Sin embargo mi papá en los momentos que estaba de buen humor y que se sentía a gusto me la contaba, con el semblante serio pero siempre que terminaba me decía una frase algo curiosa "Nada es como se ve".
Eso me despertaba la curiosidad, pues sentía que había algo que el no me decía, pero trataba de no pensar en eso, había dicho que ese niño se llamaba Harry Potter casualmente yo había nacido unos meses después que él, según mi padre la noche que nací fue fría y estaba lloviendo, se veían sombras y neblina alrededor de la mansión.
Era un poco deprimente ese ambiente, aparte que la vieja mansión en donde yo viví y crecí era muy lugubre, su estructura era casi renacentista era, muy cercano a lo que se considera arte gótico para los muggles, sin embargo, siempre me gustó esa mansión me hacía sentir como si viviera en un palacio al cual yo también temía.
Pero conforme exploraba más entendía él por qué la gente teme a las cosas que no conocen, amaba esa mansión, porque en ella encontré algo mucho más valioso de lo que yo había podido entender en ese momento, encontré el valor de mi yo interior, pude entender que no todo es como lo pintan y que un libro no se debe juzgar por su portada, a veces las cosas pueden parecer oscuras y feas por fuera pero por dentro tienen una gran belleza que pocos logran entender, por eso ama esa mansión, yo era la única que podía comprender su belleza aparte que había muchos recuerdos que me hacían feliz, aunque la mayoría me llenaban de tristeza.
Ese 8 de octubre, en el que di mi primer respiro de vida, llovía sigilosamente no había ningún ruido y cuando comienzo mi llanto la lluvia cesó y las nubes se disiparon dejando ver el hermoso bosque que rodeaba la mansión o eso fue lo que mi padre me había contado, dijo que ese día apareció un arcoiris por el reflejo de el sol ya que era de madrugada. Fue un día muy especial para el...uno que no olvida ..
Según él cuando yo nací parecía un copo de nieve desde ese momento se dio cuenta de que mi piel iba a ser muy blanca, casi pálida, pero ni mi cabello, mis ojos ni mis labios tuvieron color, pensaban que era una enfermedad que yo padecía pero después de un mes comenzaron a notar que mi cabello se tiñó de color rojo y mis ojos tan verdes como la esmeralda, mis labios también se tornan un rojo un rojo carmesí y a los 2 meses pudieron notar que todo se normalizó.
Papá me decía que lo más hermoso en mí eran mis ojos, pues el podía ver a través de ellos a mamá, decía que yo era idéntica a ella y eso le traía paz... claro que a él no le gustaba recordarlo y tampoco decirlo con frecuencia, era una persona un poco orgullosa pero también fría, sin embargo, cuando pasaba tiempo con él me olvidaba de cualquier dolor que hubiera pasado y él igual.
Al igual que una música de una triste sinfonía me daba cobijo y calidez, por más que él no fuera muy expresivo con sus emociones en público, con un solo tacto de sus manos podía sentir calidez ya mismo tiempo dolor, el dolor que lo agobiaba todos los días y el peso que había tenido que cargar alrededor de esos años, lo sentía y veía sus ojos..
Era feliz al momento en que sonreía jugando conmigo, por eso disfrutaba estar a su lado porque al igual que Lucius malfoy ambos eran hombres fríos y reservados pero la gran diferencia es que mi papá era cariñoso a su manera y siempre me protegió cualquier cosa, se enorgullecía por mis logros y victorias aunque no me lo dijese sabía que una sonrisa que él me daba significaba "felicitaciones querida hija" y aunque fallara besaba mi frente dandome consuelo, sin palabras, el decía lo suficiente.
Y eso me bastaba, por eso me sentía tan alegre de verlo feliz...no recuerdo el día en que yo nací, pero me alegra poder recordar cada una de las sonrisas de mi papá en los momentos en que escapamos de la realidad y éramos sólo él y yo, en donde nadie se podía meter y en donde todo el dolor pasado se quedaba allí, en ese tiempo que no queríamos regresar, queriamos vivir ese presente y atesorarlo como un lindo recuerdo que nadie podía dañar, papá siempre decía que lo más hermoso que había en la mente son los recuerdos, aunque éstos fueran algunos tristes no hay nada mejor que un recuerdo feliz, este tiene una gran magia que pocos logran comprender esta magia calma y cicatriza cualquier herida que tenga el alma. Y si está se quebraba la ayudaba a reconstruirse...mientras más recuerdos felices tuviera la persona, más poderosa sería la magia que tendría en su interior.
Hubo una ocasión en la que él me estaba contando la historia de Harry Potter el niño que sobrevivió en ese tiempo creo que tenía 5 años, pero lo recuerdo bien estábamos acostados en un campo de flores blancas, le dije que le daría una flor de regalo, mi papá dejó de hablar me miró levantarme y observó por si me llega va a caer, encontré la flor más bonita que había visto y la agarré luego se la di y noté que por primera vez el lloraba, nunca entendí la razón y ese día me sentí muy triste, pensé que había hecho enojar a mi papá o que lo había decepcionado... pero tiempo después compré un libro de herbologia sobre las flores y ahí pude descubrir el motivo de su llanto la flor que le di era un lirio...y de esa flor se derivó el nombre de Lily...mi madre....
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El Legado maldito
FanfictionUna historia llena de dolor, amor, rencor todo tipo de sentimientos mezclados con la magia. Tiempos oscuros se aproximan y pondrán a prueba la fuerza de este amor que creció con muchos obstáculos y que asimismo tendrá que enfrentarlos, acompáñame, e...