PSYCHO - Kookmin

Parte 1: Escape ⛓

Jimin POV.

Tik...tok...tik...tok...tik...tok...

La aguja de un reloj marcando los segundos al pasar del tiempo, eso es todo lo que puedo escuchar en este momento.
Muevo mi cabeza de lado a lado a medida que los segundos avanzan, mientras miro un punto fijo en el suelo, sé que queda poco tiempo.

Tik...tok...tik...tok...tik...tok...

Un año. Eso es todo el tiempo que llevo encerrado en este lugar. Un año.

Un año que, para mi, compensó todo lo que hice hace mucho tiempo atrás, un año en el que la sociedad me marcó como uno de los peligros más grandes, si es que llegaba a estar suelto.

¿Qué sucedió? Bueno...es una historia un poco triste, tratan con el chico al que nadie quería en el colegio, el chico al que siempre dejaban sólo porque nunca era suficiente para encajar en ningún grupo, el chico el cual era el blanco fácil para todas sus bromas. Típico de los idiotas que se creen superiores.

¿Y ahora? ¿Cómo termine aquí? Cuando la gota rebalsa el vaso, cuando llegas a tu punto máximo y no aguantas más...explotas. Y en mi caso exploté deshaciéndome uno por uno de todos ellos, cada uno recibió su merecido luego de soportar tantos años todo lo que me hicieron.

¿Me sentí culpable? Rio de solo pensarlo, porque no me sentí de esa manera, sino que...todo lo contrario, resulta ser que descubrí algo que me gustó: el poder. Y es que esa sensación de sentirse superior a quienes tanto me lastimaron, no tenía comparación con nada, era lo mejor que pude sentir en tanto tiempo, sólo que estaba oculto en mi y poco a poco se soltó.

Sé que no me van a dejar ir nunca de aquí, sé que eso depende de mi, porque claro, ¿Quién me liberaría de este lugar? Pero...por suerte...tener un haz bajo la manga tiene su gran ventaja, la cual yo supe utilizar a la perfección, y es por eso, que estoy decidido a abandonar este lugar para buscar mi libertad.

Mi cabeza se sigue moviendo de lado al lado a medida que el reloj avanza, ahora es cuando me recuesto en el blanco y frío suelo...intento contener una risa que quiere salir desde lo más profundo de mi...¿Por qué? Porque ellos no se lo esperan, nadie lo hace.

Tik...tok...tik...tok...tik.....ya no hay más tok.

Muerdo mi labio inferior en lo que escucho un nuevo sonido...sonido al cual me gusta llamar: silencio.

Sé que son las doce de la noche en punto. Él me dijo que a esta hora iniciaría su trabajo por mi, por su amor, porque quería mi libertad al ver que yo estaba bien y que no merecía estar encerrado en ese lugar. Él sabe que tomando mis medicamentos en tiempo y forma y yendo a varias sesiones con el psiquiatra va a estar todo bien, confía en mi, y yo se que voy a poder con eso.

No tengo miedo a irme de aquí, incluso es lo que más deseo ahora, y si deseas algo con mucha fuerza, eventualmente lo terminas atrayendo.

Me reincorporo quedándome sentado en el suelo, sé que cada vez falta menos, pero mientras, me dedico a jugar con los dedos de mis manos y a pensar: ¿Cómo será todo ahí afuera después de un año?

Admito que después de varios minutos mi paciencia comienza a agotarse, y es que no soy una persona que pueda presumir tener esa cualidad, no voy a mentir, no la tengo. ¿Cuánto tiempo pasó desde que el reloj dejó de sonar y el silencio reinó en el lugar? ¿Dos minutos? ¿Tres? Tal vez el reloj no está sonando, pero yo estoy marcando mis propios segundos mirando de lado a lado, como si de un simple juego inocente se tratara.