𝐃𝐀𝐃𝐃𝐘(𝚟𝚒𝚗𝚗𝚒𝚎 𝚑𝚊𝚌𝚔𝚎𝚛)

𝟑

Arlette

—Y es por eso que el Minion bob es el mejor.– explico a Charli.

Charli es mí nueva amiga, una muchacha muy dulce que entro a trabajar en la cafetería justo un mes antes que yo.

Tenemos mucho en común, nos reímos de las mismas cosas.

—Seguiré creyendo que Kevin es el mejor.– menciona con una sonrisa.

—Niñas, las mesas no se atenderán solas.– habla Marcus.

Charli y yo asentimos, e inmediatamente salimos a atender.

Es una mañana muy tranquila. El reloj marca las 10:01.

—Buen dia, ¿Qué desea ordenar?– pregunto a una señora.

—Un pedazo de pastel de chocolate y un latte.– pide amablemente.

—De inmediato.– le devuelvo la sonrisa y me dirijo nuevamente a la cocina a entregar el pedido.

Al salir con el pedido en la bandeja cruzo con Charli, quién se acerca a mí con una sonrisa.

—Dame esa bandeja, hay un muchacho muy guapo en la mesa 4 que me pidió que tú lo atendieras.– toma la bandeja y se aleja con una sonrisa.

Mí corazón se acelera al pensar en Vinnie. Acomodo un poco mí cabello, respiro profundo y me acerco a la mesa 4.

—Buen día, ¿Qué desea ordenar?– saludo con una sonrisa.

Es Vinnie, lleva un traje azul oscuro, su cabello está perfectamente peinado y un precioso reloj de oro adorna su muñeca derecha.

—Buen día señorita Scott.– devuelve el saludo con una sonrisa. —Yo quiero un café amargo y su compañía.

—¿Mí compañía?

—Si, siéntate a disfrutar algo conmigo.– menciona tranquilo.

—Me encantaría señor Hacker, pero yo estoy trabajando aquí.– intento aclarar.

—Sé que a Marcus no le molestará que tomes un café conmigo.– sonríe y observa detrás mío.

Marcus, quién estaba a solo unos pasos, asiente en dirección a Vinnie.

—Puedes tomarte un descanso.– asegura.

Aún confundida asiento.

—Entonces un café amargo para usted, y algo para mí. Ahora regreso.– aseguro y me alejo a preparar nuestro pedido.

Luego de unos minutos coloco el café de Vinnie y mí té en la bandeja, me acerco a su mesa.

—Es muy guapo.– me sonríe Charli al pasar junto a ella.

—Lo sé.– le susurro entre risas.

Coloco el café y el té en la mesa, tomo asiento frente a él.

—¿Cómo has estado?– pregunta para luego darle un sorbo al café.