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-Esta lloviendo mucho...-Comentó Atsushi a su sempai, quien estaba a su lado mirando las ventanas del pasillo.

Las clases habían terminado ese día de color gris y hermoso; por la mañana se podía ver pocas nubes en el cielo y, de un momento a otro, comenzó a caer gotas. Gotas que provocan sonidos relajantes para algunos, clases libres de unos, recreos y que los traseuntes se empaparan por completo. Claramente, hay algunos que llevaron paraguas para prevenir y tuvieron suerte de eso. Por otra parte, otros no tuvieron la misma decisión; como ya era hora de irse a casita, la mayoria de los estudiantes se quedaron barados en la entrada. Hablando con sus amigos, utilizando el celular, haciendo gestos y otras cosas.

-¡A TODO O NADAAAAAAAAAAAAAAA!

Gritaban los que salian corriendo sin nada de que cubrirse y, obviamente, terminando mojandose. Unos que otros se reian de aquella escena bastante comica.

-Que divertido.-Habló Dazai con una sonrisa divertida, mientras, bajaba las escaleras.

Caminó hasta los casilleros, donde se sacó los zapatos y depositó dentro de este, que luego se colocó sus zapatos de casa. El castaño extendió su mano hacía el borde de la puerta; inmediatamente, quedó mojada. Segundos después, sintió un empujon por su espalda haciendo que casi se tropieze cuando dio unos pasos adelante, deteniendose afuera de la preparatoria y, claramente, empapando su  pelo y parte de su ropa.

-¿¡Da-Dazai-san!?-Comentó nervioso el albino por la acción repentina.

El vendas volteó su cabeza hacía atrás, un pelirrojo parado de frente con su bolso en su espalda y un paraguas en mano estaba parado enfrente.

-Mooo~ Chuuya.-Se "quejó" caminando para dentro.-Enano peligroso.-

-¿¡A quien le dices enano!?

-Y el único enano que esta aqui eres tu 7-7

-¿¡AH!?

-¿Y A-Akutagawa?-Preguntó Nakajima nervioso e intentando detener la pelea que se aproximaba.

-Estoy acá.-Respondió el azabache dandole un leve golpe a Atsushi con su paraguas transparente.

La situación se había calmado y los cuatro chicos se marcharon en grupo de a dos. Dazai y Chuuya iban debajo del paraguas del bajito. Atsushi y Akutagawa en otro, en el paraguas del puntas blancas. El amantes de los felinos intentaba iniciar una conversación con preguntas básicas y/o contar pequeñas anecdotas. Mientras que el dúo de sempais se encontraba en silencio.

Llegando a la esquina de esa cuadra, sus vistas se enfocaron en una escena confusa y divertida; unos alumnos jugaban con el agua sucia acumuladas por la lluvia. Tenian en sus manos sus zapatos y su bolso; Dazai miró facinado el hecho y, rápidamente, se sacó sus zapatos y los tiró junto con sus cosas a Chuuya.

-¡O-oye, Dazai!-Gritó el oji-azul tratando de sostener todo lo que tenía ya que lo habia agarrado desprevenido (?.

El castaño ya no lo escuchaba, se hallaba con sus brazos extendidos y su cabeza hacía arriba, dejando que las gotas de lluvía salpicaran contra su rostro. Su pelo y su ropa estaban totalmente mojados; dio un par de vueltas y se detuvo. Nakahara y los demás se encontraban apoyados en una pared con un balcon debajo suyo; cerraron los paraguas y se quedaron allí hasta que el ojos de avellana se acercó y arrastró al albino, quien se sostuvo de Ryū al "lugar divertido".

¿Y saben como terminó?

Dazai, Atsushi y Akutagawa se encontraban empapados y con frío por la ventisca. Bueno, el suicida no sentia ni frío ya que se entretenía tirando agua a los dos muchachos. El ojos grises estaba cruzado de brazos y parado en un lugar. El bicolor trataba de escapar pidiendo ayuda a su sempai pelirrojo o salir corriendo.

Lluvia | Duojinshi | [Shin Soukoku][ Soukoku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora