Una tarde de verano en la pequeña ciudad de Forest, en plena llegada de la época de fiestas y playa, el señor Johan Lorens alistaba su maleta para salir a realizar su ocupación diaria, mientras su esposa en la cocina realizaba el desayuno, y su pequeña de doce años jugaba afuera con su perro Snow, después de un lapso de tiempo el señor Johan se despidió de su cónyuge y su pequeña y se marcho en su auto a trabajar, mientras tanto la señora Sophia terminaba de hacer el desayuno para la pequeña que seguía jugando en el patio, con el pequeño gran danés.
- Oye Snow, sabes que mamá y papá siempre se la pasan discutiendo y peleándose, a veces pienso que es por mi culpa, ¿tú qué opinas?, ¿crees qué es mi culpa? - como Mika pasaba la mayoría de su tiempo sola, para suplantar esa ausencia optó por tomar como confidente a Snow aunque este no logrará comprenderla, su vida estaba envuelta en la oscuridad de su familia, en sus momentos de peleas con entorno bipolar que confundían a la infante, por más que la pequeña intentara hacer amigos sus padres dos personas importantes en la industria de lo legal, hacían casi imposible que esta conservará relación fuera del ambito de la familia, ya que su padre después del matrimonio con su madre opto por arremeter de manera negativa hacía ambas.
- ¿Será que mamá ya acabo de cocinar?, si hizo comida deliciosa te traere un plato a ti Snowy, no olvides no salirte de aquí, si no papá se molestará mucho ya regreso - la pequeña dejo al gran danés en el patio mientras este escarbava la tierra, Mika entró en la cocina y encontró a su madre entre lagrimás, mientras esta sostenía aun el cuchillo con el que estaba cortanto las verduras para la pasta. - Mami... ¿te encuentrás bien?, ¿por qué lloras?, ¿pasó algo con papá?, mami... -. La madre de Mika dirigió la mirada hacia la pequeña dandole una pequeña sonrisa, y entre lagrimás la sostuvo en sus brazos mientras murmuraba muy sutilmente "papi no es un buen hombre, papi nos engaño a los dos, papi se ira de la casa" Mika no entendía nada pero quería consolar a su madre que en apariencia parecia destrozada mentalmente.
- Mika traerá flores para mami - dijo con un tono leve la pequeña - Mami estará mejor pronto, traeré tus flores favoritas - la madre solo soltó una pequeña sonrisa mientras bajaba a Mika de su regazo, mientras tanto la pequeña corrió por toda la sala hasta el patio donde se encontraba Snow - Muy bien Snowy tenemos una misión, encontraremos flores para mami y tu seras mi acompañante y no regresaremos hasta haberlas encontrado - Mika colocó el collar al perrito he intento salir con el pero este se negaba a salir del patio trasero.
- ¿Qué te pasa Snowy, por que no quieres salir?, deja de tonterias y avanza por favor - el pequeño cachorro seguía negandose a avanzar, al tal punto que Mika se enojo he hizo una de sus habituales rabietas, golpeando accidentalmente a Snow en la cabeza con su pie. - Yo no tuve la culpa Snowy, fue tu culpa, no me haces caso y como quieres que todo funcione si no me haces caso, mal perro, iremos por las flores quieras o no - Snow aunque un poco mayugado se fue en contra de su voluntad con Mika, ya estando un poco lejos de casa y al no haber encontrado nada la pequeña comenzo a desesperarse de nuevo.
- Bien Snowy como dice papá si no consigues algo tienes que hacerte el fuerte y darlo todo por conseguirlo, no regresaré sin haberle encontrado esa flor a mamá - el pequeño perro no entendía la situación solo quería regresar a casa para poder descansar, mientras tanto en la casa de Mika las cosas estaban un poco difíciles, el padre de la pequeña el señor Johan había regresado más temprano de lo habitual del trabajo.
Encontró a su mujer en el sillón de la estancia con un seño fruncido, y sus manos entrelazas en su pecho - Pense que llagarías más tarde Johan, ¿qué haces acá tan trempano?, ¿será que tu otra mujer te dejo salir hoy antes para que pudierás descansar? - Sophia se paró justo enfrente de Johan pero esta la ignoro en su totalidad - No me ignores Johan, dime de donde veniás, se que no estabas en tu trabajo llamarón de la empresa y dijerón que tomaste una semana de vacaciones y que regresabas hasta dentro de dos días, ¿dondé estuviste todos estos días que fingías ir a trabajar? -.
- Eso no te incumbe Sophia después de todo, ya ni siquiera eres mi mujer sigo contigo nada más por el hecho de que tienes la mitad de nuestro bufet de abogados, si no fuera por eso ya te hubiera dejado - Johan paso de largo a su esposa y está con rabia le tomó del brazo. - Acaso no te importa Mika, nisiquiera preguntas por ella, vienes de no se donde, de acostarte con la esposa de tu mejor amigo y simplemente te acuestas en tu cama nisiquieras preguntas por tu propia hija, ¡NUESTRA HIJA¡ - Johan apartó a Sophia de su lado y se sentó en la silla que estaba al lado del sillón - escuchame Sophia te corregiré una sola cosa, es tu hija desde un inicio yo no quería tener una hija, te dije mil veces que abortarás, pero hiciste caso omiso a lo que te decía, ahora hazte cargo de ella no vengas lloriqueando diciendome que necesitas de mi ayuda, mujer inútil, me tienes cansado sabes, dejame en paz me iré a dormir, no me molestes - Sophia con lagrimas en los ojos sostuvo el brazo de su ahora futuro ex esposo y lo jaló hasta la entrada de la casa.
- ¿Qué te pasa acaso estas idiota?, pedazo de basura que eres, así me agradeces estos putos años de estarté aguantando a ti y a esa cosa - las palabras de Johan fueron calladas con una bofetada en el rostro.
- A mi hija no me la insultas más, si ya no quieres formar parte de nuestra familia entonces marchate ahora y no regreses nunca, no te necesito y por la firma de abogados ni te preocupes te la regalo pero me quedo con la casa, ah, y una cosa más, le dire a August que su maldita esposa se estaba cogiendo a mi ingrato ex esposo en su puta casa mientras el se rompiá la espalda para que ella pudíera verse bonita en todas las putas reuniones, otra estupida como tú - Sophia estaba a punto de cerrar la puerta cuando la mano de Johan se interpuso, la madre de casa forcejeo un poco pero no logró cerrarla.
- Antes de irme Sophia quiero llevarme conmigo al perro - el rostro de sophia parecía confundido que pregunta era esa - ¿para qué quieres a Snow?, el es mejor amigo de Mika no te lo daré, estas estupido si piensas que si, y que es esa pregunta, deberías decir que quieres llevarte a Mika no a un animal contigo, acaso estas mal de la cabeza -.
- Ya te dije prefiero mil veces al perro que a esa asocial de tu hija, además fue un regalo de mi difunto padre tiene valor sentimental, ¿así qué me lo darás o n...? - nisiquiera terminó de vocalizar la ultima oración y Sophia ya había cerrado la puerta de la casa en la cara de su ahora ex esposo.
Mientras tanto la pequeña Lorens seguía en busqueda de la flor, tanto así que termino saliendose de la zona rural donde vivía y terminó adentrandose más a la carretera - ¿Snowy ya es muy tarde no creés?, mami tiene que estar preocupada, deberiamos regresar, no respondes he, bueno no me digas nada igual nisiquiera me importas solo juego contigo por que papi dijo que eras su preferido y a mi nunca me quiso, a veces desearía que desaparecieras, tal véz si tu no hubieras aparecido mami no estaría llorando, y papi no me golpearía, dice que no le diga a mami si no se irá con alguien más y yo me quedaré sola, tú erás el unico que me comprendía, pero ahora solo me estorbas - Mika se quedo por un par de segundos observando el rostro del cachorro, se acerco a el y le dijó - ¿quierés jugar a traer la rama Snowy? - la pequeña tomó una rama que estaba debajo de un arból entre unas piedras y se dispuso a lanzarlas lo más lejos posible para que el cachorro fuera tras ella, así fue una tras otra, tras otra y otra vez, la pequeña no se notaba nada contenta estaba cabizbaja y tenía lagrimas en los ojos y en un instante sin darse cuenta lanzó la rama demasiado lejos, y esta cayó en la carretera antes de siquiera entender el momento el gran danés ya estaba en medio de la calle y Mika solo pudo captar un ligero gemido de dolor...
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¿Qué hace falta para corromper a alguien?
RandomAlguna vez te preguntaste que pasaría si las cosas cambiasen aunque fuera ligeramente, o en las consecuencias que podría traer la simple modificación de algo, acompañame a leer las historias de distintas personas que terminaron con finales inesperad...