Mi Tutora ➴ Logan Henderson

Capítulo 17

Capítulo 17: Pasatiempos.

—Habla con él.

—Habla tú con él, tú eres la que quieres la cita, ve.

La hermosa morena exhaló y acomodó unos cuántos mechones rizados, su amiga asintió con una sonrisa y le dio delicadas palmadas en la espalda para motivarla aún más. Ella empezó a caminar hacia la mesa en donde Logan Henderson estaba sentado, sin embargo, sus pasos se detuvieron abruptamente a la par que su sonrisa se desvanecía en cuanto vio a una figura conocida acomodarse junto a él. 

Debbie Mitchell.

La chica, en vez de sentir algo de culpa o empatía por la rubia, sólo resopló con molestia. Había perdido su oportunidad del día.

Una sonrisa complaciente se dibujo en los labios de Debbie al ver a la morena regresar con su acompañante, sus miradas asesinas no pasaron desapercibidas, pero eso sólo hizo que el sentimiento de satisfacción creciera.

Debbie Mitchell sabía muy bien que ninguna de las estudiantes de L.A. Highschool respetaba su relación y siempre aprovechaban la oportunidad de atrapar a Logan para poder jactarse de ello en su cara; pero, a diferencia del resto, es que Logan siempre regresaba con Debbie, fuera cual fuera la situación. Ella era la única constante en su vida.

A veces llegaban momentos en los que en ocasiones pensaba que Logan era un inmaduro, pero sabía que esto no sería para siempre, en especial cuando Logan tenía un puesto muy importante asegurado en el negocio familiar, algún día tendría que sentar cabeza... Y ella estaría ahí. Debbie no podía pensar en una pareja más perfecta y próspera que la de ellos, ambos siendo los herederos máximos de sus familias y con mucha química por explorar. Era algo que había analizado muy bien en años anteriores.

Porque contrario a la opinión popular, Debbie no era tan ingenua al escoger una pareja con la que pudiera fortalecer su propio negocio familiar.

En cuanto ambas molestias desaparecieron de su vista, Debbie dirigió su atención al chico a su costado quién seguía leyendo un libro en completa concentración.

Si de por si Logan se miraba atractivo sólo estando ahí sentado, leyendo se potenciaba mucho más.

—Oye Loggie —Tocó su hombro varias veces con su índice para llamar su atención, pues este tenía los audífonos puestos.

Logan levantó su mirada y se quitó uno de ellos. Ninguna palabra salió de su boca.

Debbie, acostumbrada a su personalidad, volvió a hablar. —Hace mucho que no pasamos tiempo de calidad —murmuró con una mirada inocente mientras acariciaba una de las manos ajenas que sostenía el libro—, así que me preguntaba si querías venir a mi casa hoy después de clases, mis padres no van a estar hasta muuuy entrada la noche.

Cuando hizo contacto visual con él, Debbie esperaba ver una sonrisa coqueta de su parte, pero sólo se encontró con una expresión de completa frialdad que le erizo la piel.

Logan regresó su vista al libro. —No puedo. Ahora vete.

Debbie quedó sin habla ante sus duras palabras.

«¿Qué diablos pasaba ahora con él?»

Con la misma paciencia a la que ya estaba acostumbrada, volvió a intentar. —Log...