Festival y ¿celos?

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La mañana siguiente, cierto rubio se removía entre las sábanas, apenas si había podido dormir, estaba consolidando el sueño cuando llamaron a su puerta, de mala gana se levantó y abrió para encarar a la persona que lo molestaba.
Era un sirviente, le llevaba ropa nueva, solo la tomo y cerro, no tenía ganas de ver a ningún personal del lugar. 
Volvió a acostarse para tratar de dormir de nuevo, con suerte consiguió a hacerlo, ninguno de sus compañeros fue a levantarlo pensaban que deberían dejarlo, pues igual ellos no habían podido dormir del todo, se sentían preocupados por el rubio, sabían que el siempre se esforzaba pero está vez no era de manera física sino mental.

Al rededor de las dos de la tarde por fin Sai fue quien busco al rubio, debía estar muriendo de hambre, así que Sakura se encargaría de llevarle el desayuno, le pidió al príncipe que dejará a Naruto un momento con ellos, pues debían entrenar, dijo como excusa.

Al entrar a la habitación, Kakashi, Sai y Sasuke ya estaban ahí, sonrió por su amigo, se veía mejor que el día anterior que parecía estar todavía en shock por la noticia, claro no lo dijo pero conociendo a Naruto sabían que no lo diría.

—Hasta que despiertas Naruto, te traje el desayuno, tienes que comer nutrientes que así que no me reproches —se acerco a el con una charola dejándola sobre sus pies.

—¡Muchas gracias Sakura-chan! —respondió más animado, le gustaba la compañía de sus amigos y de un buen desayuno, aunque ya fueran las dos de la tarde.

Dentro de la charola había platitos, uno con frutas que no conocía pero Iruka alguna vez le había enseñado, otro con yogurt, mientras que en un plato más grande venia un huevo con algunos condimentos acompañado con pescado.
Vaya si que estos ricos comían muy bien pensó Naruto.

—Naruto, deberíamos hablar todos, creo que es necesario —Kakashi dijo serio, no quedaba mucho tiempo y todavía debía hacer entrar en razón a su pequeño alumno, sabía que el rubio era todavía muy inocente e ingenuo y que no dudaría en ayudar aunque tuviese que dar la vida, en esta ocasión, su castidad.

—No es que no quiera, pero prefiero disfrutar del desayuno sin tener una conversación tan vergonzosa.

—Bien, sabes que estamos preocupados por ti, los espero en el jardín principal para entrenar, no podemos quedarnos sin hacer nada en estos dos días —dijo para después salir de la habitación.
Sai se despidió, y Sakura saco a Sasuke de la habitación, aunque no quería Sakura le había dicho que Naruto necesitaba su espacio y Sasuke necesitaba hablar con el rubio.

Después del desayuno Naruto se visto con su ropa normal, ni de loco le cumpliría más sus caprichos al príncipe, pues antes de que Sakura llegará Sai le había dicho que el príncipe lo hacia con otra intención, en pocas palabras que era un pervertido y tal vez era una clase de fetiche verlo con kimono ya que al momento de apretar su cintura el kimono le resaltaba más su trasero bien formado. Sai recibió un golpe por parte del rubio y una mirada extraña por parte de Kakashi y agradecía que Sasuke todavía no habían llegado.

Su entrenamiento duro hasta las seis de la tarde cuando decidieron tomar una ducha para después ir a comer.
Naruto no tuvo de otra que usar el kimono que le habían dejado en la mañana pues el personal se había llevado todas sus prendas por qué las iban a "lavar".

—¡¿Cómo se atreve a llevarse toda mi ropa sin permiso y dejarme solo esto?! —grito apuntando con un dedo al príncipe que lo esperaba para comenzar la comida.
Sai lo miraba con una sonrisa de —te dije que le gusta verte el culo—, mientas Sakura y Kakashi se preguntaban por qué ellos no recibían el mismo trato, su ropa si estaba sucia y Sasuke lanzaba su típica mirada a Takahiko esperando poder lanzar sus llamas negras en cualquier momento.

End of the Day [Sasunaru] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora