7 minutos [Eren Jeager]

Capítulo 3: "Hit Different"

"Me gustaste desde el principio incluso si no eras mía"

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Habían pasado dos días y todavía no te habías contactado con Eren.

No fue porque fueras tímida. No fue ciencia de cohetes darse cuenta de que Eren probablemente quería volver a engancharse contigo, y no estabas en contra de la idea de ninguna manera. Lo que no pudiste imaginar fue qué esperar.

¿Se suponía que iba a ser algo único? ¿Quería ser amigo con beneficios? Si accedió a eso con él, ¿qué debería esperar entonces?

Rodaste los ojos ante los pensamientos y te dejaste caer de nuevo en tu cama con un ruido sordo.

Habías estado en la cama la mayor parte del día, ya que era domingo, pero ni siquiera ese era el alivio que esperabas. Los domingos nunca fueron los fines de semana "relajantes" que la gente pensaba que eran, especialmente no para ti. Todo lo que significó para ti fue la espera de otra larga semana. Otra larga semana de clases. Más asignaciones. Pruebas y repite.

En verdad, necesitabas relajarte. Relájate de verdad. Y se te escapaba una bocanada de aire cuanto más pensabas en ello.

No estabas segura de saber cómo relajarte. No estabas tensa ... pero raras veces soltaste tus inhibiciones tan fácilmente como lo hicieron todos los que te rodeaban. Además, la última vez que te soltaste y te dejaste ir ... terminaste en el armario con Eren. Y sabías cómo había resultado eso.

Aun así, suspiraste al pensar en él. Podrías imaginártelo con claridad en tu mente. La forma en que inclinaba la cabeza hacia un lado cuando te hacía preguntas. El embriagador aroma de él. Todo sobre él.

Era una tontería la atracción magnética que ejercía sobre ti.

Cerrando los ojos con frustración ahora.

No tenías que pensar más en esto ni en Eren.

Lo que necesitaba era una segunda opinión.

Ojalá regresara Hitch, pensaste.

"Oye, hola," la puerta se abrió con un ruido sordo y desagradable, haciéndote sentarte con la espalda recta.

"¡Enganche! Pensé que ibas a estar con Jean todo el fin de semana ".

Ella se rió de esto y comenzó a quitarse toda la ropa, buscando su albornoz en el proceso. Por el momento, su lado del dormitorio no era más que un montón de ropa junto con otras cosas, así que te sorprendió verla encontrar su ropa con facilidad. Al menos lo mantuvo alejado de tu parte de la habitación.

"Tome un turno en el trabajo esta noche. Tengo que conseguir ese dinero, cariño -le guiñó un ojo, frotándose los dedos. "¿Qué pasa contigo? No te he visto en mucho tiempo ".

Eso era cierto.

Entre clases, si trabaja o no está en el dormitorio, la última vez que pasaste tiempo con Hitch fue cuando los dos fueron a la fiesta juntas. Ella pasó la noche en la casa de la fraternidad y tú regresaste a los dormitorios por tu cuenta. Entre eso, ustedes dos se vieron aquí y allá. Te las arreglaste para dejar escapar que te enganchabas con alguien, pero nunca tuviste la oportunidad de contarle más o con quién fue. A pesar de eso, ella estaba inmensamente feliz por ti. Te reíste al recordar que te dio un beso en la mejilla por la noticia, diciendo con orgullo: "Esa es mi chica". Si alguien podía aconsejarle sobre esto, era ella.

"No mucho", te detuviste, moviéndote a un lado para dejar espacio para ella en tu cama.

Sabías que ella inevitablemente reclamaría la mitad del espacio allí, y cuando sentiste que la cama se hundía, tu corazón se calentó. Es cierto que la extrañaste. Hitch era el único amigo real que sentías que tenías en la universidad. Todos los demás eran solo un compañero de clase casual con el que eras amigable, pero sentías que al menos podías hablar con Hitch sobre las cosas. Lo más importante es que ella parecía preocuparse por ti. Incluso si tuvieras otras personas a las que acudir en busca de consejos, no querías la opinión de nadie más que de ella.