Gay For You (Adaptación)

I'm pagan of the good times 🏳️‍🌈

- ¡Nong Gulf! - Saint anunció su llegada a los vestuarios con el tono grave y gracioso que usaba para llamar al azabache, venía acompañado de Zee, quién le dedicó una sonrisa.

- Hola, chicos- saludo Gulf con amabilidad, aunque esos días le costaba un poco más mantener la sonrisa, por un malestar, algo que él sentía como un dolor de panza constante desde que había peleado con Mew aunque por orgullo, no quería admitir que fuera por eso.

Porque vamos, ¿Quien en su sano juicio admitiría estar mal por una pelea con el chico que secretamente te gusta?

- ¡¿Listos para volver a los entrenamientos, maricas?! - Perth entró gritando y corriendo al vestuario, arrojó su mochila al primer banco libre que vio y siguió corriendo para dar un golpe en el trasero de cada uno de los tres presentes.

- Si con eso te refieres a verte desnudo después de ducharte no- dijo Saint con una mueca de disgusto.

- Agárrame el fierro, Saint.

- Agárrame el mío- replicó el menor alzando las cejas.

- Puta, que ofertón- comentó Zee, rompiendo la falsa tensión y haciendo que los otros rieran.

Vieron al castaño entrar al vestuario, ignorarlos completamente e irse a un lugar lejos de ellos.

- ¡Hola, Mew! - gritó Perth, ganándose una mirada de aquellos fríos y gatunos ojos, sólo por unos segundos, antes de que el mayor volviera a su tarea de cambiar su uniforme por la ropa deportiva.

- Qué carismático- comentó Saint.

- El alma del grupo- añadió Zee.

- Dulce como la azúcar- concordó Perth, y dejó de actuar como un idiota un momento para colocarse su ropa de gimnasia, al igual que el castaño.

En eso llegaron Mark y un poco después, Mild, quien podría ser el mayor pero el menos puntual, y no les habló ni un seguro para cambiarse en dos minutos e ir corriendo al gimnasio junto con los otros y así no recibir ninguna reprimenda por parte del entrenador.

Los cinco se miraron y Perth no pudo ocultar la sonrisa de que al fin, iban a poner manos a la obra.

Y en cuanto Mild levantó un dedo hacia los demás, tuvieron la señal de que el plan A estaba en marcha.

Fácil, mantenerlos juntos.

Los mantuvieron a los dos en la banca al menos quince minutos, aunque no hubo resultados, no se hablaron, los dejaron en pareja cuando estaban practicando anotaciones y defensa, pero fue un fracaso porque ninguno de los dos pudo defender ni anotar de lo que evitaban mirarse o tratarse.

- No está funcionando- dijo Mark sobre el hombro de Mild-. Creo que tenemos que pasar al plan B.

- Creo que sí- Mild asintió, entre los dos le dedicaron la seña del comienzo del plan B.

El plan B era un poco menos sencillo, apartarlos a ambos y hablar del otro, la parte difícil estaba en que ninguno de los dos quería hablar del otro, y sólo respondían con monosílabos, o se encogían de hombros sin más, o el mayor, les dedicaba una mirada fría y de inmediato se alejaban con cierto miedo.

- Están difícil- comentó Perth con un suspiro cansado, mientras miraba a cada uno en puntas distintas de la cancha-. Mild, ¿Y si los estamos perdiendo?

- No hasta que yo lo diga- respondió el bajo-. Plan C.

- ¿Ya C? - preguntó Zee-. Se nos van a acabar los planes a este paso.

- ¿No es muy arriesgado? - preguntó Saint, con el ceño fruncido-. Pobre Mew- murmuró, bajando la vista.

- Hay que hacerlo, por el MewGulf.