La Mansión Lunar Infernal

Prólogo

Antes de comenzar la obra esta fue surgida por lucro de admiración a la hora de escribir aquí esta será donde yo más compartiré lo que tengo oculto y lo que más siento desde lo profundo de mi alma y de mi esencia por lo cual espero puedan respetar la historia y logre ser de su mayor agrado ya que contendrá deseos algo inhumanos como: Sangre, Muertos, Brujería, Satanismo, Ocultismo, Depresión, Perdidas de familiares, Amistades toxicas y todo con emociones negativas que tanto estuve guardando durante hace mucho tiempo por lo que querido amigo o amiga que lees esto se te pide por favor y más está prohibido tomar mi historia, de hacer alguna copia o hasta una adaptación de esta ya que me tomo mucho tiempo como ordenarme y contarla en más espero haya sido más claro en comenzar la historia comienza con.

Samael Herrera un pobre chico casi adulto siendo estudiante de universidad que estudia criminología pero este a mitad del año y ciclo escolar tristemente se obligó o peor se derribó por causa de su depresión por lo que este abandono los estudios al intermedio y este caí en la miseria y tristeza comenzando con acciones que al último harán que se arrepienta de todo antes de caer y morir.

En unas semanas después de aquel día que Samael contaba sus experiencias sobre aquellos rituales, pactos, invocaciones de demonios, sacrificios, magia vudú, etcétera.

con sus buenos amigos incluyendo a su buen primo Zack que en parte este era un chico muy calmado y positivo igual un tanto miedoso y cobarde de esos que si escuchaban algo que no les pareciera o le atacaba a su persona se quedaba callado y sin más no decía nada y se guardaba aquella melancolía y rencor bajo aquella carne y huesos que ocultaba aquel ser oscuro y malévolo corazón que tanta sed de venganza y odio buscaba pero este sabía controlar aquellas emociones parecía como si fuese una bestia consciente y saberse controlar sus instintos.

Lo mismo se diría con Santiago, Osmar, Alicia, Alejandro cada uno sufriendo lentamente su propio infierno que les vino tentando desde hace años como si fuese una petición forzada o más les obligaba recordar aquellos malos momentos de su pasado a cada uno y así lograr caer en el abismo de la miseria, dolor, sufrimiento, melancolía, odió todas esas emociones y sentimientos en una sola.

En esa fría noche en cada casa de cada uno se tenía sus propias dudas existenciales u otros no aguantaban y simplemente con un objeto en manos se trataban de quitar aquel dolor que se sentía como un tatuaje aun estando hay aún cuántas veces siguieran tratando de quitárselo así seguían estos sufrían y miraban aquellas cortadas en sus brazos, las palmas de sus propias manos observando fluir aquel rojo carmesí en caer de estás y se manchase aquel frío y sólido piso.

Más tanto Samael trataba de no caer en la depresión pero fue demasiado tarde este trataba de no pensar en tener aquel objeto filoso en manos y con pensar en liberar esas tristezas, dolencias este trataba de dormir en su dura e incómoda cama el sueño no caía en el este miraba aquel aburrido y nada interesante de aquel techo de losa con una mano en su frente posada y este hablaba por sí mismo solo, eso parecía normal para el sin más este seguía una tras otra oración 

---A veces me preguntó que hice mal o más bien porque no morí yo en vez de Vanessa--- decía este pobre bajo el poder su conciencia y tumbado en cama tratando de no ver casi nada negativo de su vida y tratar así de seguir.

Algo que en realidad no esperaba a más tardar que este caía rendido en brazos de Morfeo y al pasar como una o tal vez más horas algo que no se esperaba o más bien alguien se encontraba en esa habitación y acechaba al chico, que pasaría después o más que se diría que pasó antes del que pasará ese después para que ese fuera ese miserable futuro que cada uno sufriría en una misma sintonía.