Mine // Kenma x Hinata

chapter 12

Kenma finalmente miró su teléfono. Amaba a Shoyo, pero no podía estarse sin mirar su teléfono durante tanto tiempo.

De repente, alguien se dejó caer a su lado, apoyando la cabeza en el hombro de Kenma. Miró y vio el hermoso cabello brillante que tanto ama.

"¡Oye Kenma! Ya cambié, te iba a decir que terminé pero no quería molestarte." Shoyo señaló su teléfono. Kenma sonrió y guardó su teléfono.

"Está bien, Shoyo, no importa” Hinata sonrió y besó a Kenma antes de alejarse rápidamente.

"¡Lo siento! Olvidé que realmente no te gusta hacer nada en público." Hinata se disculpó mirando sus pies balanceándose, levantó la barbilla del chico haciendo que sus miradas se cruzen y besó al pelirrojo, sintiéndolo sonreír en el beso.

Se apartaron y Hinata apoyó la cabeza en el hombro de Kenma. "Te amo." Shoyo murmuró.

"Yo también te amo, Shoyo," Hinata levantó la cabeza antes de tomar la mano de Kenma y levantarse. Se acercaron al equipo para despedirse, Kageyama bajó la mirada a sus manos y apretó su mandíbula.

"Hey" Kageyama miró al pelirrojo. "Dejaste tus zapatos en la habitación", señaló hacia la puerta y Hinata asintió, soltando la mano de Kenma.

"¡Vuelvo enseguida!" Besó a Kenma en la mejilla y salió corriendo.

Kageyama miró a Kenma, todo el equipo se había desviado en diferentes direcciones.

"Entonces... ¿Ustedes dos llegaron lejos?" Preguntó Kageyama, apoyado contra la pared.

"¿Por qué te importa?" Preguntó Kenma, poniendo los ojos en blanco.

"Hm... ¿Así que lo habéis hecho?"

"Que? n-"

"¿Por qué no?"

"¿Qué?" Kenma lo miró.

"¿Por qué no? ¿No quieres?"

"Por supuesto que quiero, pero no creo que Shoyo esté metido en ese tipo de cosas." Kenma miró al suelo, mirándolo.

"Oh," se burló el chico de cabello oscuro. "Créame... lo se."

"¿Qué? ¿Cómo sabes...? ¿Hiciste algo?"

"Nunca le haría nada sin su permiso", escupió Kageyama. "Pero... Él hizo algo por mí"

Kenma se burló. "Sí, sí, ustedes se besaron. Shoyo me lo dijo. Nosotros tambi-"

Kageyama sonrió. "¿Solo te habló de eso? Hm ñ... No debe confiar en ti..."

"Qué"

"¿O lo asustaste tanto cuando dijo que nos besamos que está demasiado asustado para hablarte de...?"

Kenma tuvo que luchar contra el impulso de golpear a este chico ahora mismo. Sabía que era una mala idea. No es tan fuerte como Kageyama, y ​​Shoyo estaría molesto.

"No dije nada. Dije que estaba bien". Kenma se defendió con los dientes apretados.

"Oh, ¿estaría bien que me hiciera una mamada?" Kageyama preguntó con indiferencia.

Los ojos de Kenma se agrandaron y miró al chico.

"¿Qué? El- No... Él no... ¿De verdad...?" Los pensamientos de los chicos de pelo largo estaban por todas partes.

Kageyama sonrió y miró hacia arriba. "Sí. Dios, se sintió increíble. Ojalá lo hiciera una y otra vez. Su bonita carita, conmigo llenándole la boca. Hm..."

Hinata regresó en este punto. "¡Kageyama! ¿Dónde-?"

"¿Vamonos?" Kenma ni siquiera podía mirarlo a los ojos.

"Pero mis zapa-"

"Consíguelos el lunes", dijo, comenzando a caminar hacia la puerta. Hinata ladeó la cabeza y miró a Kageyama, quien se encogió de hombros y se alejó. Hinata tarareó y corrió tras su amado.
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