Pregunta sin resolver|Fiveya|TUA

Capítulo único.

Estaba solo en la sala, apartado de todo y de todos, sumido en sus pensamientos donde esperaba que nadie lo alterara más de lo que ya está, a pesar de que tenía tiempo libre no tenía ganas de hacer nada, ni de seguir estudiando o leer sus preciosos libros, ni entrenar con sus poderes a pesar de que adora practicar sus saltos espaciales, ni investigar o resolver ecuaciones para poder saltar en el tiempo y tampoco en pasar su tarde con sus hermanos, sobre todo los más cercanos que tiene, Ben y Vanya.

Vanya.

Esta misma sin quererlo es la causante por la cual esta tan abatido y sin energía más que para seguir pensando sin parar él solo. En su opinión, a pesar de que ella era tímida y dulce, cuando están juntos los dos y en ocasiones en compañía con Ben, la castaña tenía una capacidad increíble de hacer con él algo que ni en sus más locos sueños creía que ningún enemigo que pudieran tener cuando combate el crimen con los demás miembros de Umbrella Academy, ni su manipulador padre u otro ser existente que pareciera de mente aguda pudiera hacer, que tenga una pregunta que no puede contestar.

Sí pudiera comprender lo que significaba lo que le había dicho hace más de una semana, si pudiera razonar a detalle y que fuera lógico podría vivir tranquilamente, sin embargo, solo está sin descanso, luchando por poder llegar a la respuesta correcta de lo que le había dicho.

Además de que era un problema puesto que Vanya es sin duda su más cercana, si bien quiere a todos sus hermanos, ella es especial ya que por ella tiene otro tipo de cariño que no revelará porque aún no es el momento, aparte de que eso es otro tema.

Vanya era la única que entendía lo que sentía cuando todos en la casa eran un desastre, pues en su tiempo libre juntos comían bocadillos que usualmente ella hacía, se la pasaban en tranquilidad en su amplia sala mientras él leía un libro y ella tocaba su violín nuevas notas que le gustaba enseñarle, pero después platicaban de varios temas, como charlar sobre su día, sus pensamientos y de las cosas tontas que hacían sus hermanos.

Incluso si quisieran podrían escribir un libro de todo lo que ocurre, hablan o piensan los demás y hasta habría secuelas de este mismo, es muy gracioso que tengan esos momentos íntimos ya que siempre parecían estar vigilados y no poder estar juntos, pero cuando lo lograban, era sin duda el momento más placentero que tiene en ese lugar tan desagradable que es un martirio a causa de su cruel padre.

Hasta han llegado a expresar el remordimiento tan fuerte que le tienen a su tutor anciano pero con enorme fuerza para mantenerlos a todos a su merced, siendo manipulados y en constante busca de su aprobación, tenía que admitir que si le avergonzaba algo en la vida, es que los demás lo vieran vulnerable, pero con ella no presentaba ese problema, nunca tuvo que tener la guardia alta cuando estaba con la castaña, nunca tuvo que sentirse mal por algún comentario que le hiciera, es más se relajaba y era sin duda la mejor persona con la que podía estar en esa mansión y si tuviera que decirlo, si se quedaran juntos los dos sería más que suficiente para que fuera feliz y pleno.

Y pese a que se conocen tanto, esta vez simplemente, no podía entenderla.

Recordando ese día cálido y alegre que parecía ser un milagro que ocurriese debido a que la familia Hargreeves esta con la constante presión de salvar a la gente todo el tiempo, usando sus habilidades especiales para mantener el orden de todos, era un descanso agradable en el que estaba leyendo a gusto y por supuesto él estaba con Vanya, hasta que ella dijo algo que fue lo que ocasionó el problema inicial que le era imposible resolver y que lo molestaba demasiado.

—Cinco hay algo que quiero decirte-dijo gentilmente la castaña.

—¿Qué cosa Vanya?—preguntó aun viendo su libro el peli-negro.