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Lawrence

Caí dormido por la noche, en dentro de unas cuantas horas iba a levantarme temprano.

[...]

En ese sueño, yo era más alto de lo normal, era un adulto casi, que me dirigía a un departamento.

-¡Entiende mamá!, ¡Ya no quiero ir a la escuela!, ese estupido chico me molesta cuando voy a la salida, ¡Ya no lo soporto!.

Volteó a ver, era un chico, no muy alto, pero tampoco tan bajo, castaño, no sabía si sus ojos eran verdes o azules, vestido formalmente, no sé si esa sea la palabra ya que él tenía unos pantalones cortos.

[...]

Desperté, el reloj fue una de las razones.

[...]

Hora de la escuela, y otro día para pedir a LaRusso pasar el rato conmigo, esta ves con una propuesta diferente, que en verdad, nunca pensé.

Llegó y está el con Ali.

Espere un rato a que ella se fuera, no me caía mal, solo quiero estar a solas con el.

Unos metros de distancia se había alejado Ali y en el momento, me acerqué.

-Hola LaRusso- Me recosté con mi hombro en la pared, como aquellas veces que preguntaba "¿Quieres que te patee el trasero si o no?", cuando decía "No", lo hacía y cuando decía que "Si", también.

Ahora, el volteado a verme, esperando a decir la frase.

-No vengo a pelear Daniel- Era la primera vez que le hablaba por su nombre- Te invito que después de clase pasemos el rato, ¿Si?

Me miraba, sonrió.

-No- Agarraba camino pero, como buen pendejo, me puse enfrente evitándole el camino.

-Esta ves será ante tus condiciones, a la hora que quieras irte, al lugar a donde ir, tú decides Daniel.

Me miro, en ese momento, pensé que me caería rendido.

-Después de clases, me parece bien- Se fue al otro lado para irse.

Un poco seco, pero me acepto.

[...]

Ahora, en casa, que había pedido permiso a Daniel en poder cambiarme e ir por él a la suya, buscaba el atuendo perfecto para esta ocasión, con ayuda de dos personas: Tommy y Riana, ella sirve de mucho, puede decirme de que me veo fenomenal y por otro lado, que me veo como un vagabundo, es mi hermana y Tommy, es Tommy.

Buscando en las montañas y seres colgantes llamados "Ropa", en búsqueda de la vestimenta perfecta.

-¿A donde irán?- Riana hizo la pregunta más mortal de todas

-Eso lo decidirá LaRusso- Riana, que agarraba una camisa y un pantalón formal, su cara cambió.

-¿Es enserio Lawrence?, ¿Porque no lo dijiste antes?, ¡Estamos perdiendo el tiempo!, debe ser ropa casual y no una ecuación- Arrojó ambas cosas a mi cara.

-Pero quiero verme genial- Ella se fue, soy un idiota.

-Ponte la de "Metallica", no está tan mal- Volteó a ver a Tommy, quien no dijo nada por el lapso de tiempo que estábamos, sin tener a mi consejera y solo con mi amigo, sin tener la menor idea de cómo vestirme; ósea, si sé vestirme pero no pienso mucho en eso, y no tengo de otra.

[...]

Llegando toque su puerta, esperando a su respuesta.

-Hola- Venía un chico un tanto peculiar, recuerdo haberlo visto antes, pero, realmente no sé en donde- Mi nombre es Freddy- Ya me acorde

-¿El chico que acompañaba a Daniel en la playa?

-Si, tú debes ser Johnny, te pateo el trasero- Se río

-Si, me pateó el trasero- Quiero mandarlo al carajo, odio ser paciente con idiotas como este, soy un idiota, pero, este idiota es el rey.

-Te he visto en la playa- A cualquiera puedes verlo en la playa ¿Eso que tiene de nuevo?- Te has juntados con esos maricas- Dio otra de sus insoportables carcajadas

-¿A que te refieres con maricas?- Esto se puso tenso, el momento perfecto para callarle y hacerlo comer mierda

-Esos chicos de la playa, que se reúnen por la tardes, ellos son gays, ¿Acaso te empezaron a gustar Los hombre después de que LaRusso te pateó el trasero?

-Podrías callarte por favor, no quiero llenar de sangre la casa de Daniel

-¡Ah!, ¿Con que le llamas por su nombre?, de seguro te gusta y te le vienes a declarar "Oh LaRusso, soy un marica que le gusta todo los penes del mundo, se mi esposo y tengamos un millón de enfermedades de transmisión sexual, ¡Bésame!"- Que todo el mundo me perdone pero le rompí la nariz.

-¡Cállate carajo!, no quise hacerlo pero ahora lo hice, ¿Y si soy marica que?, ¡Te puedo romper la cara las veces que quiera!, no te tengo miedo, vuelves a topare con LaRusso, le dices de cosas a él o a mi y serás hombre muerto- Oi el chillido de que Daniel abrió su puerta, tenía la misma vestimenta del primer día que fue a clases, con sus lentes negros.

-¿Que paso aquí?, ¿Me perdí de algo?- Mire al chico, él se fue.

-¿En serio te pusiste la misma ropa que te pusiste en el primer día?

-Si, por cierto, me gusta tu chaqueta de cuero- La toco- Habrá una fiesta en la playa, ¿Podrás llevarme ahí?

-Por supuesto, pero, ¿Y tú mamá?- No le tenía miedo a nada, más que a la señora LaRusso

-Esta trabajando, regresará más tarde por la noche.

Un Secreto De CobraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora