𝘠𝘰𝘶 𝘉𝘦𝘭𝘰𝘯𝘨 𝘞𝘪𝘵𝘩 𝘮𝘦 // 𝘈𝘬𝘢𝘢𝘴𝘩𝘪 𝘒𝘦𝘪𝘫𝘪 ✨

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-La primera vez de tantas
8/01/21

𓆉

2015
Clínica Orakata - Japón Tokio.

En aquella clínica se encontraban adolescentes de 11 a 18 años formados esperando su diagnóstico de cada mes, eso definiría si podrían ser dados de alta o estar encerrados en aquel lugar un mes mas

Lo especial de esta fila de personas, es que todos tenían desordenes alimenticios, en especial se encontraba una chica de 16 años Suicune Ayanami, un desastre para los encargados del lugar

Esta se encontraba mirando hacia la ventana bastante nerviosa, está vez se había esforzado con el tratamiento y en ingerir todo alimento para poder subir aquellos kilos que le faltaban, pero odiaba a la Doctora, según la pelinegra la mayor quería mantenerla encerrada ahí para siempre

Una voz la saco de sus pensamientos, haciendo que quitara su mirada del gran ventanal

—Suicune Ayanami.

—¿Si?—pregunto.

—Pasa, es tu turno querida

—Ah si si, claro—dijo con una sonrisa nerviosa a lo que hizo que la enfermera arqueara una ceja

La chica paso la puerta de madera viendo a la doctora Lara, experta en toda enfermedad que pudiese existir. Para Ayanami no era nada mas que un obstáculo para poder tener una vida

—Señorita Suicune..—la doctora la miro de arriba a abajo con una expresión de pocos amigos, haciendo que la chica rodara los ojos—Revisemos tu expediente—comenzó leer aquellas hojas mirando con atención cada palabra para finalmente ver de nuevo a la peli negra—Intentaste hacer trampa mas de 3 veces y tienes una muy mala conducta, algo que no va con el reglamento del lugar

—Puff, eso fue hace como un año yo era una niña rebelde pero ya cambie—dijo sonriente y con sus manos entrelazadas.

—La última vez, fue hace menos de 2 semanas—la menor frunció el ceño y miro a otro lado indignada. La doctora soltó un suspiro de frustración—En fin, vamos a pesarte la última vez solo subiste 3 kilos y tu peso ideal deberia ser por lo menos unos 55 kg

—Esta bien—comento sonriente segura de si misma. La pelinegra era alta, media 1.68 y era bastante delgada, por las situaciones de su vida había llegado a ese punto en que casi su anemia se convierte en una grave leucemia, algo que podría ser terminal para ella

Al poner la báscula y subir en ella, la doctora se sorprendió la chica había subido los 4 kilos que le faltaban: 56 kg
La menor abrió sus ojos como platos y sus ojos comenzaron a brillar

La doctora le indico que se sentara en la camilla para poder examinar su cuerpo, tomo su respiración y miro sus ojos y el color de su lengua, estaban tornando un tono normal

—Quisiera que tomaremos algunas muestras de sangre, si todo está bien se te dará de alta hoy mismo, por lo que deberías de llamar a tu madre Suicune

La pelinegra hizo una mueca, aún no quería ver a su madre, podría decir que la odiaba, y no quería verla ni en pintura gracias a lo que la ya mencionada había echo en el pasado

La menor salió del cuarto y se dirigío a otra sala donde le sacarían algunas muestras de sangre, era la etapa final ya para poder salir de aquella clínica, le había costado bastante, casi muere, la razón de que se le tomarán bastantes pruebas de sangre es que la femina estaba en riesgo en tener leucemia

Al entrar se sentó en una camilla, y cerró los ojos esperando aquel pinchon en su brazo izquierdo, no le gustaba ver como la sangre salía de su cuerpo le producían náuseas