Y SE QUIEBRA

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La noticia de que Katsuki había sobrevivido a un secuestro de un villano se había corrido por toda la escuela como si fuera pólvora, algunos mostraban su admiración y otros su preocupación al no saber cómo podría esto afectar al rubio en su futuro.

Pero la verdad es que Katsuki aún no había salido de su trance, escuchaba y respondía lo que le preguntaban sobre el villano pero su mente se encontraba como en el limbo, dónde quizás no quería salir.

Y aunque no quería admitirlo y jamás lo haría en voz alta es que tuvo miedo, si miedo a morir cuando vio que ninguno de los héroes que tenía cerca lo fueron a auxiliar, todos se miraban entre si mientras lo veían asfixiarse por ese fango verde.

¿Quien lo salvó? No lo recuerda porque se desmayo, lo que si tiene presente es que varios héroes lo felicitaban por haber aguantado bastante bien y que era bienvenido a sus agencias cuando quisiera. Pero todo eso carecía de valor alguno en ese momento.

Al ser el chisme del día, nadie se percató de que Izuku no asistió a clases ese día. Aunque a nadie le importaba la verdad.

El pecoso en cambio estaba sentado en una banca de un parque, al ser horario de trabajo y clases no había nadie por el lugar, algo bueno para él porque aunque no fue a la escuela aún así portaba el uniforme escolar.

De pronto un olor extraño le llego al olfato, busco de dónde provenía y al ver que detrás de la banca estaba una hamburguesa a medio comer, se cubrió la boca y corrió a unos arbustos a vomitar.

- Quizás estoy muriendo - susurro al soltar una fuerte arcada, hasta que sintió su celular vibrar, lo saco de la bolsa de su pantalón mientras se limpiaba la boca y al ver que era de la clínica donde fue esa mañana a hacerse los exámenes de sangre supo que los resultados de su prueba ya estaban listos.

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-¿Embarazo? - pregunto aún incrédulo de lo que el doctor le había dicho - No, no puedo estar embarazado, soy un chico jajaja - empezó a reírse secamente -por favor doctor no bromeé conmigo - pidió aún con una sonrisa forzada pero el doctor lo miraba con seriedad.

- Hay casos dónde los hombres pueden engendrar vida, son pocos pero los hay, solo que los profesores de hoy en día procuran más en informe sobre ser héroes que otra cosa, olvidando datos tan importantes como este -.

Izuku no podía creerlo, no podía pasarle eso a él, no a él. El doctor al ver que el pecoso empezó a llorar mientras negaba con la cabeza, agarro de su escritorio un folleto y se lo enseñó.

-Apenas tienes el tiempo límite para deshacerte de él si es lo que quieres, aquí te muestra el procedimiento y las causas si es que deseas hacerlo, aunque para poder proceder a la cirugía necesitamos la autorización de tu tutor -.

Izuku agarro el folleto dónde decía los pasos a efectuar para quitarse eso, solo dió un suave gracias y salió de ahí.

"¿Embarazado de Kacchan? No, no puede ser, ambos somos hombres, ¿Verdad?" Pensó al ver de nuevo los resultados de su análisis de sangre, arrugó la hoja y corrió de ahí.

No sabía que había echo mal, quizás nacer, si eso, nacer fue su primer y grande error.

Habría sido diferente su vida si aquel día que se encontró con All Might este le hubiera dicho que si podía ser un ¿héroe? ¿Habría tenido una oportunidad para demostrarlo? ¿Tendría entrenamientos especiales por su condición de quirkles? ¿Habría podido tener amigos de verdad? ¿Podría haber sido admirado por otros? Bueno son cosas que jamás sabría.

Frustrado y enojado consigo mismo por no darle cierre a esa obsesión, se detuvo frente al barandal de servía de protección para no caer al río que pasaba abajo del puente.

En ningún momento se detuvo, solo se subió sin mirar atrás, ni siquiera cuando a la mente le llegó el rostro de su madre.

- Perdón madre pero la verdad es que ya no puedo más - susurro al ver que si caía desde esa altura, era 100% probable que moriría, algo que su lastimado y maltrecho corazón buscaba con vehemencia.

Sonrió con amargura y sin dudar un segundo se lanzó al vacío pensando que al fin todo iba a acabar.

-Quizas en mi próxima vida si pueda tener un don - susurro.

Para su mala suerte quizás, una mano lo sujeto antes de que fuera demasiado tarde.

Izuku abrió los ojos sorprendido al no saber que había pasado, hasta que fue dejado en el suelo y lejos de aquel lugar tan peligroso.

-¡Pero que le pasa, porque hizo eso! - grito cuando se levantó del suelo y corrió hasta ese sujeto alto y empezó a pegarle en el pecho con los puños -¡Porque, porque, porque lo hizo! - quiso saber mientras empezaba a llorar de frustración al ver que cuando por fin reunió valor para ser cobarde, alguien se metió en sus planes a joderlo.

-Creeme niño nada de lo que te está pasando en este momento es excusa para suicidarte -. Izuku dejo de golpear el pecho de aquel hombre y retrocedió un par de pasos.

-Usted no sabe nada, nada de mi ni de mi vida - soltó con la voz quebrada y rota mientras lágrimas gruesas inundaban sus mejillas.

-Quizas no, pero puedo escucharte si es lo que deseas, vamos hazlo, quizás te sientas mejor cuando termines de hacerlo -.

Izuku al ver que ese hombre se sentó en el pavimento y palmeo a un lado de él, supo que podía desahogarse y que mejor que con un extraño, uno que esperaba ya jamás volver a ver.

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Después de que aquel hombre de máscara rara escucho todo lo que Izuku dijo, sonrió de manera disimulada.

"Aaaaahhh, te pareces tanto a Tomura" pensó con perversión. "Bueno héroes, eh aquí uno más que no pudieron salvar" pensó con diversión.

- Entiendo que tú mayor sueño era ser un héroe que salva a las personas con una gran sonrisa, pero todo eso se te fue arrebatado cuando te dijeron que no tenías un don y para acabarla quien te quito todo eso de Tajo fue tu mayor ídolo del mundo - al decir eso Izuku asintió con la cabeza mientras se limpiaba las lágrimas que no dejaban de salir de sus ojos - y para rematar estás embarazado de quién creías era tu amigo de la infancia - agrego mientras veía al pecoso de manera disimulada. Quien asintió una vez más sin dejar de ver el suelo. - Bueno, en esta vida todo tiene consecuencias, sino lograste ser un héroe ¿Que sigue? -.

Izuku levanto el rostro y miro al hombre al no entender lo que este decía.

- A muchos los hacen héroes porque de villanos nadie les ganaría, no fuiste héroe porque irónicamente todos los que te pusieron el pie para que cayeras y no cumplieras tu sueño fueron los mismos que gritan a los cuatro vientos que quieren ser héroes para salvar vidas, cuando destruyen una a su paso y todo porque creen que no tienes valor por no tener un don -.

Izuku empezó asimilar todo lo que estaba escuchando de aquel sujeto extraño, hasta que esté posó su mano en la cabeza del pecoso de una manera tierna y gentil.

- Muchas veces a algunos los hacen héroes porque de villanos nadie los detendría, dime, ¿Que serás tú? - pregunto con tono serio.

Fue en ese momento que Izuku empezó a levitar por el aire, asombrado miro al enmascarado quien le sonrió con ternura.

- No te dez por vencido en la vida y aunque sea a la fuerza haz que te recuerden - y sin decir algo más se fue de ahí, dejando a Izuku en shock al no poder creer que ese sujeto extraño que lo salvó le había dado el mejor regalo del mundo, uno que jamás pensó tener por no creerse merecedor de él.

-Gracias, gracias - susurro mientras empezaba a llorar pero esta vez de felicidad al ver que tenía un don, un don.
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DEL OTRO LADO DEL REFLEJODonde viven las historias. Descúbrelo ahora