༶📄• V.I

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Libardo se encontraba limpiando su departamento, no tenía muchas ganas de hacer algo productivo, estaba muy desanimado.

El sonido del timbre lo saco de su pensamiento, camino hacia la puerta y la abrió con poco interés.

-¿Que quieres?-es jean, estaba parado con las manos en sus bolsillos.

Se apoyo un poco en el marco de la puerta-Tenemos que hablar, quiero entrar a ver mis hijos-la cara de libardo cambio completamente

-A mí casa no entras, no vas a ver a mis hijos, los puedes contagiar- le cerró la puerta en la cara.

El mayor quedó desconcertado, tocó la puerta nuevamente.
-¿Que te h-hice Libardo Antonio Isaza moreno?- hizo puño en la puerta

-Me haces infiel jean Carlo león espinal, distes positivo y puedes contagiar a los bebés-más que una buena escusa- Andate con ella y dejanos, les diré a los niños que fuiste por cigarros y nunca más volviste, no lo hagas difícil-se escuchó la pequeña voz del menor detrás de la puerta.

-Pero sabes qu... espera!, ¿Yo infiel? no mames libardo y lo del Covid bueno... pero quiero estar contigo-insistió nuevamente

-Ellos son mis hijos me pertenecen, al igual que tú-reclamo

-Dejaron de ser tus hijos cuando te fuiste con ella y los cambiaste por Gansito y Mateo, no vengas hacerte las víctima, yo ya no quiero saber más de ti, es mejor que te vayas- pegó su espalda a la puerta

-Nadie los reemplazo libardo y mas te vale que me habrás o si no ,yo mismo lo voy abrir a las malas-ante las palabras de jean, libardo volteo a mirar por el agujero de la puerta, quería asegurarse que sus palabras no fueran en vano.

-jajaja no seas idiota león, yo no pienso abrir la maldita puerta, si quieres puedes romperla, como rompiste mi corazón, pedazo de idiota-tomo en sus brazos a Wiz y a Motta, dirigiendo a su cuarto, ignorando la presencia del mayor.

-Yo no te he roto nada... Bueno a excepción de ya sabes que y no es el corazón! pero mira yo no quiero romper la puta puerta es mejor que abras por las buenas , ya mismo!- grito desesperado

-No te oigo, te seguiré ignorando león, mis hijos son mi prioridad ahora, alejate de nosotros y andate con esa, puedes mantener a otros hijos, idiota-hizo su cueva con las mantas y acomodo a sus hijos para poder dormir a gusto.

-Si me escuchas, no te hagas como el que no me conoces, se me esta acabando la paciencia- le dio una patada bastante fuerte a la puerta-Que me abras Antonio!-volvió a gritar frustrado.

-Que te den por atrás león! No lo haré-el menor comenzó a llorar, tiene miedo de la misma persona que sentía protección antes.

-Al que le voy a dar por detrás es a ti, si no abres ya mismo, te juro Libardo que voy abrir esta puerta, cueste lo que me cueste!-volvió a golpear la puerta, por un momento olvidó que los vecinos habían salido para presenciar tremendo escándalo.

-Eres un idiota- sonrió sarcástico- Haz lo que quieras, en un rato vendrá kasi y le diré que te enseñe a respetarme, para que dejes de estar pendejo- Volvió a su nido después de desquitarse

-Esta bien Libardo-dijo calmado, más por la vergüenza de los vecinos, quienes los miraba con mucha curiosidad, sin más el mayor se encaminó hasta el lobby principal.

-Señorita, buenas tardes, me podría dar la llave para el departamento #113 por favor, es que se me extravió-pequeña mentira piadosa.

-Claro, pero esto tiene un costa extra a su renta-dijo caminando hasta la pared donde se encontraban muchas más llaves- rellené el formato, por favor.

24 HRS ||LIEAN||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora