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El suave sonido de la música era todo lo que aquel rubio podía escuchar al hablar con sus allegados que hablaban de temas políticos o de cuando se casaría para ocupar el trono de su padre.
Aquel príncipe no estaba atento a nada de lo que ocurría en aquel baile, celebraban su décimo octavo cumpleaños, era solo un día más para el.

No se le conocía por ser un príncipe excéntrico ni superficial, realmente hubiera deseado no nacer en la familia real, el no quería un romance obligado y sentenciado con alguna doncella que le presentaría su familia, el realmente deseaba casarse con quien su corazón eligiera, encontrar el amor de su vida sin importar si se ganaba la vida vendiendo flores u horneando pan, el le ayudaría de cualquier forma para vivir prosperando con amor real.

Pero así no era la vida real, debía estar en ese lugar siguiendo las reglas y asintiendo a lo que sus padres pedían, podían dejarle el reinado a su hermano gemelo quien era el favorito por naturaleza, pero al ser menos responsable no querían condenar al reino tampoco.

Se despidió de los duques y caminó hasta una de las mesas para probar algo de tomar tratando de aliviar el ambiente aunque sea un poco, la música y la comida buena, pero ver tantos vestidos pomposos y caballeros en trajes sofisticados lo mareaba, riendo falsamente y cortejando a otros con falsedad para asegurar su puesto en lo más alto.

Caminaba notando a jóvenes doncellas acechándolo queriendo conocer más de él, sonreía amablemente para ser amable pero realmente no se veía interesado en mantener una conversación ya que muchas de ellas buscaban más el dinero que el amor.

Se acercó a las esquinas del salón donde estaba más solo y se agachó para dar caricias en su pequeña gata moteado, era su mejor amiga y quien lo salvaba de ambientes tan pesados como esos.

— Pensé que ya era tu hora de dormir, Olivia, gatita traviesa...—comentó con la voz un poco ronca, sonrió un poco cuando acaricio sus orejitas notando que adoraba esos toques, con su ronroneo lo sabía perfectamente.— ¿Escapaste para verme? Eres adorable...

Hubiera seguido más tiempo con la gata pero una voz lo hizo salir de su paz de cinco minutos.

— Johnny —Se escucho la voz rasposa de su madre quien no se veía tolerante a su pequeña escapada de las doncellas.— Las princesas de Inglaterra e Irlanda te están esperando para que pases tiempo con ellas, necesitas escoger quien será tu esposa, ya tienes 18 y debes escoger esposa lo pronto posible o seremos la burla del pueblo si no te casas —Aquella señora exageraba todo y reprendía el comportamiento de su hijo que solo daba mimos a su gata moteada.

— Lo siento...iré enseguida....—soltó un pequeño suspiro y se levantó para arreglar sus ropas, trato de sonreír de forma amable y se acercó hasta aquellas princesas para charlar, trataba de ser lo menos grosero posible para complacer a su familia.


Por su parte, un joven pelirrojo miraba desde las afueras del palacio como las personas disfrutaban de los bailes y la buena compañía, deseaba tan siquiera poder ir una vez para ver que tan maravilloso sería bailar como todos los demás.

— ¿Te imaginas Dylan?, ir al baile y encontrar al amor de tu vida al qué tal vez solo verás una vez en ese baile pero será hermoso que no le sacaras de tu cabeza, es mi  sueño ir a solo un baile con todas las personas de clases, pero solo soy un simple florista —soltó algunos suspiros  mientras miraba a su mejor amigo.

— Claro que lo imagino, es lo que siempre he querido, pero debemos poner los pies en la tierra y entender que no pertenecemos a esa clase de personas...ahora volvamos a casa, ya es muy noche y mañana debemos madrugar como cada día, tú vendiendo las flores más hermosas de todas y yo preparando deliciosos postres —soltó una risita e invito al chico a caminar para irse a sus casas antes de que se hiciese más tarde.

— Lo se, otro día a la rutina...te prometo que algún día iremos a esos bailes, Dylan —trato de tomar la mano de su mejor amigo pero sabía que se ganarían más miradas de odio ante eso.

Estaba prohibido ser homosexual en Francia en esa época, dos ingleses que se acababan de mudar huyendo de un dictador que se hacía llamar rey. 

Just let me adore u  [Lunny]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora