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La fiesta había acabado abruptamente, Gabriel me llevaba a casa y el camino fue un silencio incómodo, había tanto que decir pero nadie tenía las agallas de preguntar o quizá no quería escuchar la verdad.

Llegamos a casa y me quedo en el asiento, respiro sonoramente y me giro un poco.

- Gabriel...

- Tengo que ir a buscar a Troy para evitar que haga una estupidez, hablamos después ¿Esta bien?

- Te acompaño... - El niega con la cabeza.

- No es buena idea. Hablamos mañana.

Estoy a punto de decir algo pero con un suspiro rendido me despido y bajo del vehículo. Camino sin esperar que se vaya, pero su camioneta no se mueve, después escucho su puerta abrirse e instintivamente me giro.

El me toma de los brazos suavemente y me observa, acto seguido con sus manos tibias toca mis mejillas y planta un beso en mis labios.

- Te prometo que mañana temprano hablaremos y te contaré todo. - Observo su rostro sin decir nada, sus ojos parecen algo cansados, un poco tristes pero sinceros. Lo beso y después me enredo entre sus brazos.

- Ten cuidado. - Finalizó con un susurro.

Veo su camioneta irse y no se si quiero saber toda la verdad, me siento un poco hipócrita porque yo le pedí que me contara todo y le reproche por no hacerlo pero, ¿Y si algo no me gusta? Quizá hay cosas que son mejor no decir para evitar hacerle daño al otro.

El reloj marca las 3 y 45 de la madrugada y aún no puedo pegar el ojo, me revuelvo en las sábanas esperando que los chicos estén bien. Luego observo el celular.

- Que llegue un mensaje, que llegue un mensaje, que... - Me giro a la ventana cuando escucho un ruido, pero regreso la mirada al celular, intentando con todas mis fuerzas que los astros se alinien y reciba un mensaje de Gabriel que diga que todo está bien. Vuelvo a escuchar un ruido y me levanto.

Observo con los ojos bien abiertos a Troy parece algo tomado pero aún conciente de lo que hace, o al menos eso analizo en los 0,5 segundos que lo veo.

Abro la ventana y me asomo un poco.

- Abre.

- ¿Qué?

- Me estoy congelado por favor.

- Pudiste enviar un mensaje.

- Olivia, por favor...

Corro hasta la planta baja y abro la puerta del patio trasero, el entra sin decir nada, parece que había escapado un poco de la lluvia o que alguien le lanzó una cubeta de agua, con poca agua.

- ¿Cuál es la finalidad de dar una llave de tu casa, que solo te permite entrar al patio? - Lo observo atónita y ciertamente algo molesta por su descaro, aparte le había dado una llave para entrar solo al patio pensando que jamás la ocuparía.

- De verdad solo dirás eso. - El baja el rostro un poco apenado y suspira.

- Lo siento, de verdad siento haber dicho esas estupideces. - Me observa de nuevo esperando alguna expresión que signifique su salvación y sin querer yo la hago, la verdad yo tampoco había sido totalmente sincera y justa con el, aún así no sedo tan rápido.

- ¿Qué haces aquí?

- Tengo frío. - Le lanzó una mirada tipo ¿Enserio? Y el reacciona de inmediato y continua. - Quería disculparme...

- ¿Que más? - El suspira rendido.

- Y no quiero ir a casa ¿Es una explicación válida?

- No, la verdad es que no.

- Olivia, no quiero hablar con Gabriel al menos no ahora.

- No crees que estás siendo un poco injusto con él.

- ¿De verdad? Te parece poco que me haya ocultado que papá está saliendo con alguien más, cuando mamá apenas cumplió un año de fallecer, también ocultar, otras cosas. - El camina hacia las escaleras y le observo. - Solo hoy, por favor. - Menciona con un pie en el primer escalón y esperando una respuesta. Suspiro y le asiento.

Estábamos acostados lado a lado mirando el techo de mi habitación.

- Gracias por prestarme la ropa de tu papá. - Comenta mientras se gira a observarme.

- No hay problema.

- ¿Aún estás molesta?

- Si, pero, solo un poco. -Muerdo mi labio inferior para saber si hablar o no, pero finalmente me giro a verlo. - La verdad me siento molesta porque no me contaste que ya hubo otra mejor amiga que salió con tu hermano, y bueno otras cosas pero supongo que por lo demás tendrás tus motivos, solo que no me puedo molestar contigo por ninguna cosa ya que yo tampoco te conté lo de Gabriel, por eso no tengo tanto derecho a molestarme, o eso creo. - El me observa por unos largos segundos.

- Dan tenía una amiga que se llamaba Amber, yo la conocí en una fiesta y desde ese entonces se convirtió en mi mejor amiga, confiaba tanto en ella, era algo problemática pero de verdad era muy importante para mí, así que cuando falleció mamá la necesitaba mucho, pero ella se empezó a alejar, sin ningún motivo y las pocas veces que la veía parecía que, no sé, ocultaba algo, dejándome cada vez más solo, hasta que no hablamos más. Un día la vi saliendo de casa muy alterada así que la detuve me dijo que Gabriel era un imbecil, que había estado saliendo con él pero de pronto le había amenazado para irse, que él la alejo de mi, luego me dijo que tampoco quería saber nada de mi y sin dejar más explicación que esa se fue, después me enteré que también se había ido de la ciudad. Le pregunté a Gabriel que había pasado y solo dijo "No necesitas a alguien como ella en tu vida". - Mi piel se erizo al escuchar eso. - Y tampoco dijo nada más.

- Pero, no entiendo. - Le menciono en medio de un suspiro.

- Así me sentí yo. - El suspira también. - Así me siento siempre que se trata de Gabriel. Nunca sabes lo que esperar de él, todo lo hace por su cuenta, a su criterio y no hay nada que puedas hacer, puede que sea mi hermano pero, ya no se si puedo confiar en él.

Lo observo pensativa y él no decía nada más, luego se gira dándome la espalda, regreso la mirada al techo, estoy más confundida, pero sé que solo puedo esperar a que todo se aclare mañana, cuando hable con Gabriel.

Antes de dormir le escribo diciéndole que Troy se quedará a dormir en casa que no se preocupe, después de un minuto él responde "De acuerdo"

Un de acuerdo que ciertamente no me deja dormir.

Despierto de golpe cuando escucho un ruido. Observo la habitación, el sol golpeaba la ventana con fuerzas iluminando toda la habitación, maldigo por no volver a cerrar la cortina ayer cuando llegó Troy ¡Troy!

Me doy cuenta que no está en la cama, me asomo al lado en el que durmió y no están sus zapatos.

Reviso el celular 10:56 AM veo 2 llamadas perdidas de Gabriel así como un par de mensajes, suspiro y después de segundo viendo el celular abro su conversación.

Cuando despiertes avísame ¿Podemos hablar en el desayuno?

Respondo los mensajes y me levanto de la cama, necesito una ducha y procesar lo que ayer dijo Troy ¿De verdad me dirá todo? O solo hará lo mismo que con Troy, decir la verdad a medias.

Solo hay una forma de averiguarlo.






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⏰ Última actualización: Aug 01, 2021 ⏰

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My Bestie Brother's - El Hermano De Mi Mejor AmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora