Solo por una noche

Aunque a veces el olvidar es mucho más fácil que el recordar, para algunos es casi imposible hacerlo, al sentir en lo más profundo de su ser, algo extraño que no los deja cerrar el capítulo y seguir, y quizás ese era el caso del Joven Agente Parrish; Que mucho más allá de la intriga, curiosidad o tentación, aún conservaba aquella carta, la cual sin saber el porque, leía cada noche al llegar de su trabajo sin falta.

A pesar de haber trascurrido ya varios mes desde los sucesos del Benefactor, aún sabiendo que nadie de la manada se esforzaba por recordar esos días llenos de sangre y terror, prefiriendo estos simplemente seguir con sus propias vidas de estudiantes, este prefería seguir estancado, recordando una y otra vez ese día, en el que el Joven Stilinski le contó que su vida valía cinco millones de dólares.

Algo dentro suyo cambió esa noche, y seguramente estaba relacionado con el hecho de haber encontró aquella misteriosa carta con hermosa caligrafía, tras salir de la jefatura después de terminar su turno.

"Querido Agente Parrish, espero que no se disguste por mi atrevimiento al escribirle la siguiente carta, y que en su lugar, lo disfrute".

"Soy un buen amigo de la manada, o al menos algo así me consideró; Alguien con mucho poder, o al menos con el suficiente dinero para hacerle un ofrecimiento, el cual espero que no vaya a rechazar".

"Estaba cerca de la comisaría cuando para mi buena suerte pude escucharlo hablar con el joven Stilinski al respecto de la Deadpool y como no tendría problema en suicidarse por lo que vale".

"Y la verdad me parece un delito demasiado grande, que alguien tan joven y rebosante de energía como usted, si quiera considere el hacer algo así por dinero, por otra parte pensé.. ¿Qué estaría dispuesto a hacer por cinco millones de dólares?".

"Y he aquí el motivo de mi carta; Por el bien de la humanidad, que merece que alguien como usted siga con vida, me ofrezco a darle cinco millones, con una única condición".

"Una noche entera junto a mi".

"Prometo ser dulce".

Pd: Si se atreve a aceptar mi condición, no dude en escribirme, y llegare de inmediato con usted.

~P.H.

–¡Maldición! -Exclamó lanzando la carta lejos de él- Aún no se que diablos hago con esa cosa.. Debí deshacerme de ella hace tiempo.

Un pesado suspiró fue liberado por él joven Agente, quien se levantaba de forma inevitable para recoger la carta una vez más y guardarla como lo había hecho ya, una innumerable cantidad de veces.

–¿De verdad estás considerando el aceptar algo así, Jordan? -Se preguntaba al dejar caer la carta sobre la mesa de su pequeño departamento- Bueno, al menos podrías salir de este basurero si lo piensas..

Una leve risa llena de ironía salió de la boca del castaño, quien se desvestia disponiéndose a ducharse.

–¡Son 5 jodidos millones, Jordan!. Decir que al menos podrías salir de este lugar es absurdo, podrías mudarte y hacer ese viaje que tanto haz querido a Hawai y seguiría quedándote mucho dinero..

Reposo su mano sobre la llave de la ducha, girandola levemente para sentir al instante como la fría agua azotaba contra su cuerpo, provocándole un escalofrío.