Hybrid World ♡MikaYuu/YuuMika♡

4🍃 La liebre y el zorro (YuuMika)

No está basado en la fábula, la cual tiene el mismo título que éste shot.

A comenzar :D

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Normalmente las libres son más grandes que los conejos, además de ser solitarios.

Quien diría que una liebre macho fuera bastante atractivo, solo que siempre estaba solo o con algún otro híbrido de su especie o con un lindo conejito de pelos castaños.

Pensaban que ellos formaban una linda pareja, ya que Yuichirou, siempre tomaba de la mano a Yoichi o lo abrazaba. Pero ellos no son más que simples parientes, el tomarse de las manos quería decir que era el simple gesto de llevar al menor para que no se perdiera.

Y sí, el castaño era menor que el azabache, además de que vivía en un pequeño pueblo fuera de Tokio, solo que a veces iba de visita.

Ese día, Mikaela, compañero de departamento de Yuu, tenía que soportar al pequeño conejito, que hacía varias preguntas sobre varias cosas y eso era irritante para el joven zorro quien no estaba haciendo nada, ya que sus deberes escolares los terminó muy rápido.

-¿Cómo está Tomoe? -cuestiona el azabache al castaño quien comía pastel de zanahoria hecho por su primo mayor, quien volvió a la sala con un batido de chocolate para Mikaela y agua para él.

-Bien, también quería venir pero ya sabes, no puede cerrar la pastelería por el caos que se hace. Por cierto, mandó galletas de jengibre -dejó su plato en la mesita auxiliar, fue hacia su maleta, la abrió y sacó un recipiente de aluminio, volvió a cerrarla y llevó el traste hacia la sala -. Yo le ayude a decorarlas -dijo quitando la tapa y mostrando las galletas -. Tomen una si gustan.

-Gracias, pero ya comí -habla el rubio con su mejor sonrisa.

-Yo tomaré una -comenta el azabache, agarro una de tantas y empezó a comerla. Al terminarla tomó otra y también se la acabó -... Uhm~ están deliciosas. Pero ya no como más, si no, ya no tendré para el desayuno de mañana.

-¿Cuánto tiempo te vas a quedar? -cuestiona el rubio al castaño.

-Normalmente me quedo dos semanas, pero solo me quedaré esta, la próxima entro a clases -responde con tristeza.

-Oh que mal. ¿En qué nivel estás? -cuestiona nuevamente el ojirubí.

-Apenas pasaré a segundo de secundaria -responde el ojioliva -. Ojalá hubiera una universidad allá. Así Yuu-Kun estaría todo el tiempo conmigo -dijo triste mientras que su primo le abraza y acaricia la cabeza.

-Ya falta poco para que me gradué, además abriré una pastelería y cafetería aquí en Tokio, pero los postres serán con la misma receta familiar, incluso el nombre del establecimiento será el mismo, pero debo de hablar sobre eso con Tomoe y mi tía -al castaño se le iluminaron los ojitos.

-¿Irás a vernos? -cuestiona feliz el castaño viendo al mayor, quien asiente, seguido lo abraza por el cuello y enreda sus piernas en la cintura de este.

-¿Tu familia vive lejos, Yuu-Chan? -cuestiona el ojirubí viendo al ojiesmeralda.

-En tren son tres o cuatro horas. Pero en auto son como cinco -responde el azabache.

El castaño miraba molesto al rubio. Quien se dió cuenta de eso, más no dijo nada. Su irritación paso a incomodidad de un momento a otro.

-Oh, está bien -fue lo único que dijo. Yuu sonrió y rio un poco.

-Tú también vas a ir Mika, somos socios y como parte de lo que acordamos te llevaré a conocer el pueblo y la pastelería. Seguro les caerás bien -dijo con un leve rosado en sus mejillas y sus grandes y largas orejas levantadas.