Los fanfics de Poe [BSD]

-09-

El escritor estaba listo para su maratón de películas de Disney, vestía un kigurumi de mapache que Ranpo le había regalado por su cumpleaños. Lucy le había hecho un pedido que le llamo mucho la atención, no era quien para negar una historia, no, claro que no, mucho menos si se la pedía la chica que le había introducido a aquel mundo de escritos e historias. 

Llegó a su cama junto a Karl y varias bolsas de dulces, estaba listo para ver La princesa y el sapo.

Desde la última historia que le envío Kyouka había decidido no abrir nunca más una de esas. Se suponía que él sería el villano, pero la historia tuvo un horrible giro que hizo que Akutagawa lo golpeara. Ni siquiera la intervención de Nakahara Chuuya serviría de algo.

Pero estaba demasiado aburrido y no podía dormir...

Así que abrió el mensaje de Kyouka que ya estaba dormida, ahí estaba el link que le redireccionaría a la historia de la noche.

“El tigrecito y el Sapo” por: “mistery-raccoon”.

Ahí iba de vuelta.

—Entonces, la princesa tomo al sapo...

La pequeña rubia que estaba sentada con su felino se mostraba cada vez más emocionada conforme se acercaba el clímax de la historia, mientras el albino ponía una cara de asco.

—Ahí viene mi parte favorita... —susurró la niña con ilusión, mientras el albino la miraba con extrañeza.

—Lo rodeo con sus manos, y acercó sus labios a su viscoso rostro lleno de verrugas.

La cara de asco del albino se hacía mucho más intensa, mientras los ojos azules de la rubia se expandian fascinados.

—Y le dio un beso de amor que convirtió a aquel sapo en un apuesto príncipe... Y vivieron felices por siempre.

—¡¿No es hermoso?!.

—¡No! ¡Es asqueroso!. ¡Yo nunca, nunca nunca, besaría a un sapo!.

—¿Estás seguro? ¡Aquí está tu príncipe, besalo besalo!.

El albino soltó un sonoro grito al ver al gato disfrazado de sapo que Elise le estaba poniendo enfrente, ambos comenzaron a correr por toda la habitación, hasta que el felino terminó volando al techo.

—¡Yo besaré a todos los sapos que sean necesarios para encontrar a mi príncipe!.

—¿Esta todo listo? —preguntó el doctor Ougai entrando a la habitación, la madre del albino mostró el vestido que había hecho a la pequeña Elise.

—Siempre lo mejor para mí mejor cliente en todo Yokohama.

El doctor regaño a la pequeña niña. Diciéndole que no podía consentirla como lo hacía, ella agachó el rostro, el albino solo río viendo de reojo como a su pequeña amiga le regalaban un cachorro, él ahora tenía que partir junto a su madre a su hogar, que si bien no era tan hermoso y lujoso como el de Elise, tenía todo lo que necesitaba ahí.

Vivía en los barrios pobres de la ciudad de Yokohama, donde nadie tenía más que los otros, todos eran iguales, y todos eran amigos.

Revolvía su comida mientras inhalaba para saber que le faltaba, su padre se acercó a él.

—Huele muy bien, ¿Está listo ese Chazuke?.

—¡Ajá!.

—Si así es, entonces voy a probarlo...

El padre del niño llevaba la comida hacia su boca de forma lenta, mientras el niño lo veía.

—¡No, espera!.

El niño devolvió la comida a su olla de preparación, añadiendo unas cuantas especias extra para concentrar el sabor.

Cuando su padre lo probó su mirada se iluminó, mientras una sonrisa se extendía por su rostro, definitivamente el niño tenía un don para la cocina.

—¡Este es el mejor Chazuke que he probado en mi vida! Seguro será todo un éxito en nuestro restaurante.

El padre del niño le sonrió, los ojitos del pequeño se iluminaron, esperanzados, el sueño de su padre se había convertido en su propio sueño con solo oírlo hablar de él, veía esa esperanza en la mirada de su padre y la absorbía, para transformarla en la esperanza propia. Salieron de casa para compartir la comida con sus vecinos, podía que no fuera una gran mesa, o un gran banquete, pero las sonrisas en sus rostros eran más valiosas que el oro mismo.

Sus padres cerraron la puerta al verlo durmiendo, el niño abrió los ojos al escuchar la cerradura de su habitación cerrarse, se arrastró en su cama hacia la ventana, mirando la estrella más brillante del firmamento mientras apretaba contra su pecho la imagen que su padre le había entregado, del diseño de su restaurante ideal.

—Por favor por favor, por favoooor —susurraba el albino con esperanza hacia el cielo, cuando bajo la mirada encontró al lado suyo un sapo, que al croar le hizo soltar un fuerte grito, al tiempo que salía disparado a la habitación de sus padres.

¡Pido una disculpa si este capítulo es muy corto! Hace mucho tiempo no he visto la película y mi memoria es algo extraña, mañana tendré que comenzar una nueva semana de trabajo así que no tendré tiempo de ver la película, así que los capítulos se aferran a lo que mi memoria diga, perdón por eso :(

Además me ha resultado un poco difícil elegir a los personajes... No se quién podría cumplir el papel de Lawrence, ᵃʸᵘᵈᵃ

Y- por la personalidad de los personajes, pensé que esto hubiera quedado genial siendo Soukoku ¿No? ¡Pero nos toca ver a Aku como Naveen! Esto será muy divertido, o muy extraño.

además quiero disculparme si hay errores, tienen a una escritora disléxica y medio pendeja, y medio dormida.