#20 Un día cualquiera para todos.

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Un mes después.

Apenas sale el sol, Tiaret despierta bostezando con una gran fuerza, se limpia su ojo con la mano y va al baño para desvestirse y empezar su día.

Su dueño no es alguien malo o quizás perverso, pero él siempre anheló compañía de una mujer o en este caso de un animal, ella solo lo complace vistiendose así y no rebajandose a más, solo cuando llega su celo empieza a abusar de él, solo deja su c...

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Su dueño no es alguien malo o quizás perverso, pero él siempre anheló compañía de una mujer o en este caso de un animal, ella solo lo complace vistiendose así y no rebajandose a más, solo cuando llega su celo empieza a abusar de él, solo deja su cabello desenredado fluir con el agua de la regadera, teniendo una sensación de libertad.

Mientras tanto Angela.

Ella despierta como siempre, sola en su cama y recordando a Emilio, se pone de pie para quitarse su camisón blanco el cual era el favorito de su esposo, se pone un vestido colorido, blanco con manchas de colores, unos zapatos cómodos y para finalizar unos brazaletes de color dorado.
Camina cansada para preparar el desayuno, mientras calienta el café, la segunda en despertar es Vanessa, camina despacio para ayudar a Angela en la cocina.

Angela--- no tienes que ayudarme.

Vane.--- vamos, quiero pagar el tiempo que cuidaste a Emilio, además, no soy tan vieja.--- con una tierna sonrisa en su rostro.

Ambas preparan el desayuno.

Fudo despertó mas temprano que todos y fue  correr por la madrugada, es disciplinado y serio, al llegar a su casa se da un baño para relajarse.

Fudo.--- (veamos... hoy es domingo,  debo dar un paseo por la ciudad, comprar algo de pan, inspeccionar a los perros y también comprar una consola, me la merezco.)--- sonríe relajandose.

En el departamento de Erika, Stella despierta temprano para hacer ejercicio en la sala, al llegar escucha que alguien abre una puerta y es Nana con las mismas intenciones, antes de que ella hablara con Stella, esta se pone de pie, recoje su tapete y se encierra en la habitación otra vez, Nana aprovecha y estando seria comienza a hacer ejericico.

Stella.--- (la odio mucho, ahora me obliga a irme de la sala.)--- hace estiramientos.

Nana.---(me siento muy mal, quiero repararlo pero nisiquiera me da la oportunidad de explicarle todo.)--- hace sentadillas.--- (extraño hablarle y que me responda con risas.)

Erika despierta con sueño,  se pone una falda pegada al cuerpo, una chaqueta y camisa abotonada, va a la cocina y prepara el desayuno.

Erika--- miren quién despertó temprano.--- dice riendo.

Nana.--- buenos días, mamá.--- mirando por la ventana.

Erika.--- cuidando la figura?--- risitas.

Nana--- ya te dije que no quiero ser gorda, es por eso que quiero ser más hermosa.--- sentada tocamdo la punta de sus pies.

Erika.-- ya eres hermosa, simplemente necesitas comer para crecer y desarrollarte.--- sonríe.

Nana.--- no quiero ser una pelota.--- puchero.

Stella Y Nana Siempre Juntas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora